¿Coches eléctricos baratos? Sí, los hay, pero renunciando a algunas cosas
Siguen siendo muy escasas las ofertas de coches eléctricos económicos, y siempre llevan aparejado algún tipo de peaje en potencia, habitabilidad, equipamiento, etc. Será así durante una temporada, hasta que su producción pueda masificarse y recargar sea fácil para cualquiera.
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Publicado: 18/10/2020 21:30
Ahora mismo, si nos queremos comprar un coche eléctrico nuevo, y descontando ayudas y la rebajita que pueda hacernos el concesionario, por debajo de los 30.000 euros solo hay utilitarios, con una notable excepción, el Hyundai IONIQ eléctrico, que ya es un coche de casi 4,5 metros de largo, aunque el básico rasca los 27.000 euros y va un poco justo de equipamiento.
Eso está por encima del precio medio de compra de un vehículo en España (partiendo de niveles pre-COVID), así que me voy a centrar en los modelos que están por debajo de los 25.000 euros. Solo están el Volkswagen e-Up!, Skoda Citigo e IV, SEAT Mii Electric, smart EQ fortwo y smart EQ forfour.
En dichos modelos las versiones térmicas se han reducido mucho o directamente desaparecido
Pero soy portador de malas noticias. El trío de utilitarios de VAG tiene tal cantidad de pedidos -a nivel europeo- que se han cancelado nuevos encargos de momento, hasta que se fabriquen los ya encargados. Por otro lado, los smart EQ de dos plazas afrontan su próximo fin de producción en Francia -Daimler quiere vender la fábrica de Hambach (Francia)- y habrá que esperar al nuevo modelo fabricado en China.
De ese mismo país va a venir todo un chorro de agua fresca, el Dacia Spring, que se beneficia de las sinergias de producción del Renault Kwid para otros mercados y que también se fabricará en China. Aparte estará el Renault Twingo ZE, que de momento no tiene precio fijado, y será un poco más económico que el smart FQ forfour (hablamos esencialmente del mismo coche solo que con algo más de baterías en el caso del del rombo).
Es cierto que hay más modelos eléctricos interesantes, como los Opel Corsa-e, Peugeot e-208, Renault ZOE, MINI Cooper SE, Honda e o Fiat 500C. Estos también están por encima de la media de compra de un coche nuevo y muchos los podrán considerarlos como juguetes muy caros respecto a lo que se puede adquirir por el mismo precio.
En España es realmente difícil vender el concepto de utilitario eléctrico, aunque sea precisamente el tipo de coche ideal para recorrer cortas distancias, sin contaminar, a un precio de risa, y sin necesidad de grandes prestaciones, ni gran autonomía, ni de un maletero para ir a la playa. Sí, aún son caros.
Ahora bien, algunos fabricantes han encontrado un filón relativamente inexplorado, el del alquiler por minutos. PSA vio que era dificilísimo vender los Citroën C-Zero y Peugeot i0n (basados a su vez en el Mitsubishi i MiEV retirado antes del mercado), pero que se les podía sacar un dinerillo alquilándolos por minutos.
Renault va a hacer lo mismo con el Dacia Spring, inicialmente se va a utilizar como coche para su servicio de car sharing, Renault Ziti, donde el público podrá ir haciéndose al modelo con poca publicidad. A bote pronto no es un modelo demasiado atractivo si analizamos sus cifras principales, al menos para pensar en comprarlo.
El automovilista español debe mentalizarse que el «bueno, bonito, barato y eléctrico» aún tardará un poco en llegar
Es un poco más grande que el Twingo ZE, 3,7 metros de largo (+120 mm), pero es un poco más estrecho (-25 mm). Tiene cuatro plazas, un motor de 44 CV y baterías capaces de recorrer 225 km en ciclo WLTP mixto (bastante realista) o 295 km en ciclo urbano. Limita su velocidad a 125 km/h, que en España es, honestamente, lo justo y necesario (¿para qué más?).
Una cosa debe quedar clara, faltan años para poder comprar un coche eléctrico de 20.000-25.000 euros con cinco plazas, un maletero abundante, prestaciones de compacto medio de 100-120 CV, gran maletero, autonomías que superen los 300-400 kilómetros y que encima cargue rápidamente en menos de media hora. Por favor, algunos deben aterrizar.
Tendrían que ser modelos diseñados de cero como eléctricos (no conversiones de coches térmicos, la mayoría de los económicos), producidos en grandes cantidades, y sin incertidumbres de suministro de baterías en grandes cantidades. Eso, claro, y una red de carga rápida para perder el miedo a las largas distancias, sin esperas y sin cargadores fuera de servicio.
En 2019 se matricularon 12.293 turismos 100% eléctricos, que se sumaron a unos 28.135 ya circulando
Mucho me temo que la inminente y devastadora crisis económica que viene por delante alejará eso un poco, y los coches eléctricos seguirán siendo de momento un producto más pensado para quien se puede permitir un segundo coche, empresas, o clientes con elevado poder adquisitivo. Las previsiones del Gobierno para 2023 -250.000 eléctricos de nueva matriculación- me parecen cada vez más de ciencia ficción, por muchos MOVES que haya.