El examen de las baterías de coches eléctricos atrae a dos grandes marcas y a las aseguradoras
Los coches eléctricos cuentan con un elemento clave para su funcionamiento y para el bolsillo de sus propietarios: la batería. Los fabricantes han admitido no saber con certeza la degradación de las baterías, pero ya hay quien puede estimar el grado de degradación y también a quién le interesa mucho esta herramienta, incluidas dos grandes marcas.
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Publicado: 29/12/2022 17:00
El componente más caro de los coches eléctricos es la batería. Sustituirla puede ser un importante problema para el bolsillo de su propietario, especialmente cuando se ha superado la garantía oficial del fabricante. La gran mayoría está ofreciendo un máximo de entre ocho y diez años o un kilometraje que oscila entre los 160.000 y los 200.000 kilómetros
Algunas marcas garantizan que la batería conservará más del 70 por ciento a los ocho años de antigüedad, sustituyéndose sin coste alguno si se demuestra que la cantidad de energía almacenable es inferior a este porcentaje. Los fabricantes de coches eléctricos, y los de las baterías, han admitido que no pueden conocer con precisión la degradación de este dispositivo, especialmente estos últimos al no disponer de acceso una vez que salen de sus instalaciones.
Conocer cómo se degradan las baterías de coches eléctricos es clave
Pero hay una cuestión determinante en el elevado precio de las baterías que no sabes. Y es que no solo es consecuencia directa del alto coste de la química de las celdas y el número de estas para ofrecer más o menos capacidad y autonomía. En realidad, los fabricantes suman un extra que estiman por los costes generados si se han de enfrentar a una reclamación en garantía de una batería en mal estado y las reparaciones que se necesiten realizar.
Twaice, la startup alemana que presentó un novedoso método de medición del estado de la batería la pasada primavera, ha desvelado su funcionamiento y así conocer el estado de la batería y predecir cuánto durarán realmente. El sistema se basa en inteligencia artificial y modelos estadísticos que simulan el comportamiento de la batería a través del estrés térmico y eléctrico durante muchos ciclos de carga en el uso diario real, comparando también con los datos obtenidos de un proceso de envejecimiento al que someten las químicas celulares que utilizan diferentes marcas.
Los seguros, los más interesados en conocer el estado de las baterías
La empresa ha revelado que Mercedes y Audi ya son dos de sus más importantes clientes. Un importante adelanto pero que tiene un participante clave más en este juego, y que está casi más interesado que los propios fabricantes: las aseguradoras. Estas ya se «pirran» por conocer de primera mano el estado de las baterías de los coches eléctricos para asegurar un vehículo, y de lo que dependerá la prima anual.
