Coches eléctricos chinos, las cuatro poderosas armas para conquistar Europa, y no solo su gran autonomía o precio
Mucho han cambiado las marcas chinas en las dos últimas décadas. Los fabricantes asiáticos ya están desembarcando en Europa contándose por decenas y, en absoluto, sigilosamente, poniendo en pie de guerra a las marcas europeas. Conquistar a los clientes del Viejo Continente es su reto a medio plazo, con cuatro claves que han sabido manejar a la perfección.
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Publicado: 08/04/2023 20:00
Que China ha invadido ya Europa es una realidad. Las marcas asiáticas se abren camino entre la poblada oferta de coches nuevos con una sugerente gama de modelos que está poniendo en un serio aprieto a las grandes marcas europeas. Las asiáticas se cuentan por decenas, y cada vez salen más que pretenden hacerse un importante hueco en el la región occidental del continente europeo.
Lotus, smart o Polestar mantienen su sede en Europa, pero cuentan con una importante inyección de capital a través de Geely, sumándose una lista muy poderosa de capital 100 por 100 chino como Aiways, BYD, NIO, Xpeng, MG, Lynk & Co, BAIC, Baojun, Wulling, DFSK, Maxus, JAC, SWM, Chery, OMODA, JAECCO, HiPhi o VinFast. Todas tienen una serie de denominadores en común que han ido madurando en las dos últimas décadas para dar a los clientes europeos lo que buscan a un precio más barato, y especialmente en los coches eléctricos.
El diseño es clave en los coches chinos destinados a Europa
Muy atrás ha quedado aquella estrategia de copiar y reproducir el diseño de los modelos europeos más representativos, una fórmula solo para vender coches en el gigante asiático con sonadas demandas por parte de las marcas europeas, y que sabían que no tendrían mayor recorrido fuera de sus fronteras. El diseño es una de las verdaderas claves con las que están conquistando Europa, y en el que algunas marcas han invertido mucho dinero al pedir ayuda a prestigiosos estilistas -como Italdesign o Pininfarina- para lograr este objetivo.
Estilos rompedores y futuristas, más propios de concept cars, empezarán a llegar a las carreteras europeas en los próximos años. Justamente, lo que las marcas europeas no se atreven a lanzar. Y lo mismo pasa con los interiores, estableciendo alianzas con los principales proveedores europeos. Los mismos a los que también recurren las marcas del Viejo Continente, con amplios catálogos de calidades y soluciones adaptadas a sus necesidades.
Los coches chinos son líderes en tecnología y seguridad
Pero el diseño no es lo único que han madurado los asiáticos, sino también la tecnología. La que respecta al infoentretenimiento son verdaderos reyes, como también lo son en las baterías de tracción, capaces de ofrecer autonomías de verdadero récord. Los chinos atacan con la experiencia de importantes proveedores de automoción, recurriendo a la tecnología de sistemas motrices de Bosch, Vitesco, Continental, ZF, AVL, Magna o Schaeffler, ampliamente reconocidos a nivel mundial.
A los que recurren las marcas europeas también, y de lo que se han aprovechado los asiáticos. Son sonados las sistemas de propulsión y motores eléctricos muy avanzados, y de los que te hemos dado cuenta, pero raro es el fabricante europeo que recurre a estos sistemas, pues prefieren un desarrollo propio, que comparten con otras marcas al establecer alianzas de cooperación.
Diseño exterior e interior, y tecnología son las verdaderas armas con las que los chinos están atacando Europa, y a lo que se suma también la seguridad. También han quedado muy atrás aquellas pruebas en las que esta cualidad quedaba en entredicho al ver cómo se partían literalmente algunos modelos asiáticos, incapaces de ofrecer una resistencia mínima a la torsión o a la rigidez.
El precio, el verdadero caballo de batalla de los eléctricos chinos
Las consultoras de ingeniería han prestado su asesoramiento para superar los exigentes requisitos de seguridad a los productos chinos, con lo que también cumplen con los protocolos europeos para vender sus novedades en el Viejo Continente. Las pruebas de Euro NCAP a las que se someten ofrecen resultados, si no igualados, mejores que algunos modelos europeos, contando con avanzados asistentes de conducción que, en algunas marcas, suelen ser opcionales. Los asiáticos más avanzados, ya están equipados con soluciones de conducción autónoma de nivel 3.
Y, por supuesto, el precio. A pesar del enorme desembolso que realizan, el coste de producción en China es tan diferente, y extremadamente bajo, en comparación con otras regiones mundiales, que les convierten en estrellas y con el que superan ampliamente a los rivales más directos, que no pueden competir en igualdad de circunstancias. Un cúmulo muy importante de factores por los que Carlos Tavares, erigido firmemente defensor de los fabricantes europeos, ha pedido límites y aranceles a los chinos por la invasión que temen en los próximos años, pero que realmente ha empezado ya.