Te habrán dicho que los coches grandes son más seguros, pero este estudio descubre una verdad incómoda
Los vehículos son cada vez más grandes y pesados. Circunstancia que, para muchas personas, supone un incremento de seguridad. La realidad, sin embargo, no es tan simple, y un estudio de IIHS lo demuestra con datos.

Cuando piensas en seguridad vial, es probable que creas que un coche más grande y pesado protege mejor a sus ocupantes en caso de accidente.
Al fin y al cabo, si comparamos un Mini Cooper con un enorme Range Rover, la diferencia de tamaño y masa sugiere que el SUV ofrece más protección.
Sin embargo, un estudio reciente del Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras (IIHS, por sus siglas en inglés) demuestra que esta creencia tiene límites claros.
Cuanto más pesado y voluminoso es, peor es la maniobrabilidad y estabilidad de un coche
Más peso, ¿más seguridad?
El estudio analizó accidentes entre vehículos de diferentes tamaños y encontró que, si bien los coches más pesados ofrecen mayor protección hasta cierto punto, esa ventaja se estabiliza rápidamente y deja de ser significativa en modelos más grandes.
Los datos muestran que para los automóviles que pesan menos que el promedio (1.815 kg), añadir 225 kg reduce significativamente el riesgo de muerte de los ocupantes.
Pero, cuando se supera ese peso promedio, agregar más masa apenas mejora la seguridad del conductor. Y, por el contrario, incrementa el peligro para otros vehículos en caso de colisión.
Los SUV y las camionetas ya no son tan letales como antes
Hace años, los SUV y las camionetas representaban un enorme peligro para los ocupantes de coches más pequeños debido a la diferencia en el diseño estructural.
Sus chasis estaban más elevados, lo que provocaba que en un choque frontal, el SUV pasara por encima de la zona de absorción del coche más pequeño, aumentando el riesgo de muerte para sus ocupantes.

En los últimos años, los fabricantes han rediseñado la parte delantera de estos vehículos para que sus estructuras de absorción de energía estén mejor alineadas con las de los automóviles, reduciendo el riesgo en impactos frontales y laterales.
Gracias a estas mejoras y al uso generalizado de airbags laterales, los SUV y las camionetas han dejado de ser tan letales para los coches más pequeños como lo eran en el pasado.
La otra cara de la moneda: el peso sigue siendo un problema
A pesar de estas mejoras, el peso extra sigue siendo un factor clave en la mortalidad en accidentes.
Entre 2011 y 2016, los ocupantes de coches tenían un 90 % más de probabilidades de morir en choques contra SUV de más de 2.270 kg que contra otros automóviles. En el periodo 2017-2022, este riesgo se redujo, pero aún era un 20 % mayor.
Las camionetas también siguen siendo peligrosas. Aunque su riesgo ha disminuido, en 2017-2022 todavía duplicaban la probabilidad de causar muertes en un choque contra un automóvil en comparación con otros coches.
Un peligro mayor para los demás
El estudio también muestra que cuando se añade peso a un automóvil por debajo del promedio, el riesgo para los ocupantes de otros coches apenas aumenta.
Sin embargo, en los vehículos más pesados, agregar los 225 kg antes mencionados sólo reduce mínimamente la tasa de mortalidad de sus ocupantes, pero aumenta significativamente la tasa de mortalidad de los conductores de los coches con los que chocan.
Esto significa que elegir un SUV o una camioneta extremadamente pesada no sólo no te hará mucho más seguro y te hará gastar más, sino que te convierte en una mayor amenaza para otros conductores en la carretera.
Conclusión: el equilibrio es clave
El estudio se ha centrado en Estados Unidos, pero sus conclusiones son aplicables a cualquier región y mercado automotriz del mundo.
El mismo determina que el peso promedio de los vehículos ha aumentado en los últimos años, acercando más a los coches y los SUV en términos de masa, lo que ha mejorado la compatibilidad en los accidentes.

Sin embargo, mientras que los SUV han reducido su peso promedio, las camionetas han seguido ganando kilos, aumentando el peligro que representan en colisiones.
Según el presidente del IIHS, David Harkey, «estos números muestran que la transición a camionetas más livianas también podría tener grandes beneficios, especialmente porque muchos conductores no las usan para transportar cargas útiles pesadas».
Por tanto, aunque los coches más grandes pueden ofrecer cierta ventaja en seguridad, su beneficio es limitado y, en muchos casos, pueden poner en mayor riesgo a los demás.
Además, queda abordar el asunto del comportamiento dinámico de este tipo de vehículos. Cuanto más pesado y voluminoso es, peor es la maniobrabilidad y estabilidad de un coche y, por tanto, se convierte en más vulnerable ante ciertos imprevistos o a ciertas velocidades.
Así que la próxima vez que alguien te diga que cuanto más grande es el coche, más seguro es, muéstrale este estudio.
Fuente: IIHSFotos: Motor.es
