¿Cómo contamina un vehículo por el hecho de circular?
Resulta muy sencillo perderse entre las informaciones que llevan apareciendo en los últimos años acerca de la contaminación del sector del transporte, el CO2, las partículas, los óxidos de nitrógeno... Permitidnos un breve repaso para poner cada cosa en su sitio y entender mejor la situación.
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Publicado: 03/12/2019 22:30
En el día a día es muy habitual que se confundan temas similares, pero diferentes, como son los tipos de contaminantes que se generan cuando rueda un vehículo. En primer lugar, hay que desechar la idea de que hay coches que no contaminan cuando circulan. Eso es una mentira gigantesca.
Cuando un vehículo rueda por una carretera sus neumáticos están capturando materia depositada por el asfalto, es machacada con el peso (aproximadamente, la cuarta parte de peso en la superficie de una pisada humana) y la expulsa hacia atrás o los laterales. Eso se llama reemisión de partículas, y el fenómeno empeora cuanto más pesa el vehículo y mayores son sus neumáticos de ancho.
En otras palabras, se puede dar la paradoja de que un Opel Corsa de principios de los 80 emita menos partículas rodando -eso sí, con el motor apagado- que un Tesla último modelo con apisonadoras de 21" y una masa que se acerca más a las dos toneladas. Lo mismo puede decirse de SUV, furgonetas y demás vehículos entrados en kilos, aunque sean eléctricos.
También se produce una emisión de partículas por emplear los frenos y por el propio desgaste de los neumáticos. En los coches eléctricos y los híbridos se minimiza el uso de las pastillas de freno, luego emiten menos partículas -en este aspecto- y los frenos durarán más kilómetros. De ahí que la conducción agresiva sea más contaminante sin importar el consumo que se produce de energía.
Las partículas son tan pequeñas que las respiramos y de los pulmones pasan al torrente sanguíneo, de ahí a cualquier órgano en segundos
Hablemos ahora del escape. Los vehículos eléctricos no tienen escape, luego no tienen emisiones de escape. ¿Significa esto que no tienen emisiones? Sí y no. Carecen de emisiones locales o directas, pero la energía que gastan ha tenido que generarse de alguna forma, y salvo que hablemos de fuentes 100% renovables, algo se habrá contaminado, pero menos que con un coche normal.
Los térmicos y los híbridos -cuando hacen uso de su motor de combustión- tienen emisiones locales y directas. Suponiendo una combustión perfecta, emiten CO2 (dióxido de carbono), N2 (nitrógeno) y H2O (vapor de agua). Estos gases están presentes en el aire común y son inocuos per se, solo que el CO2 es uno de los que contribuyen al efecto invernadero. A mayor concentración de CO2, más calor absorbe el planeta. Hoy día supera las 400 partes por millón, el 0,04% de la atmósfera.
En función de la tecnología de limpieza de escape, hay otras emisiones indeseables, como CO (monóxido de carbono), PM (partículas), NOx (óxidos de nitrógeno), SOx (óxidos de azufre) y HC (hidrocarburos no quemados). Estos sí que son gases contaminantes, que no gases de efecto invernadero (GEI). Es frecuente confundirlos como si fuesen lo mismo, pero no es así.
El CO2 solo aumenta el calentamiento global, pero los demás... el CO es venenoso, las PM producen cáncer y enfermedades cardiovasculares, los NOx producen contaminación fotoquímica y enfermedades cardiovasculares, los SOx producen lluvia ácida y los HC también son muy peligrosos para la salud. Esto se combate con catalizadores, DPF/GPF, SCR, EGR y demás sistemas.
Se combate contra el CO2 porque es el principal responsable de que aumente la temperatura media del planeta y eso altere el clima a nivel mundial, no porque contamine
Sin embargo, el CO2 se emite en una relación directa en función del consumo. Un coche de hace 50 años que consuma 10 l/100 km de gasolina emitirá exactamente el mismo CO2 que un último modelo -potente- que gaste lo mismo. Por cada litro de gasolina, gasóleo, GLP, GNC, biocombustibles o combustibles sintéticos se produce una cantidad fija de CO2. Los coches de hidrógeno solo expulsan vapor de agua por su escape.
Otros gases de efecto invernadero son el metano (CH4) si se libera a la atmósfera (p.e. en redes de distribución de GNC), o los gases que se usaban para el aire acondicionado antes de la implantación del R-134 en el caso de que se fuguen del circuito. En determinadas circunstancias se puede considerar que el vapor de agua (H2O) también contribuye al efecto invernadero. Tanto el óxido nitroso (NO2) como el ozono (O3) a baja altura son consecuencia de las emisiones de NOx, y también contribuyen al efecto invernadero.
Así pues, ¿qué tecnología es la más limpia? La que menos gases emita, a secas. Puestos a elegir, es preferible que las emisiones tóxicas sean lo más cercanas a 0 -lo cual es imposible- y que la liberación de CO2 sea lo más baja que se pueda. Por eso los coches eléctricos son la combinación más limpia, por no mencionar que aprovechan la energía mejor que el resto de tecnologías (alto rendimiento).
Hay que distinguir entre gases de efecto invernadero (alteran el clima) y los gases contaminantes o tóxicos (perjudican la salud)
En definitiva, cuando se habla de "emisiones", sin especificar, seguramente se estén refiriendo a emisiones de gases de efecto invernadero, las que agravan el cambio climático. Y cuando se habla de "emisiones contaminantes", en rigor, hay que referirse a todos esos gases que empeoran la salud de las personas pero que apenas tienen impacto en el clima -o no tienen ninguno-.