Qué hay que tener en cuenta al comparar seguros de motos

Cuando nos disponemos a contratar un seguro, en demasiadas ocasiones priorizamos el ahorro sobre el resto de cuestiones a considerar. Tenemos la falsa sensación de que no nos hará falta y sólo lo contratamos porque la ley nos obliga. O «por si acaso».

La realidad es que todos estamos expuestos a un accidente en la carretera y los usuarios de motocicletas y ciclomotores somos incluso más vulnerables. Por eso, cuando vayas a contratar tu seguro de moto a todo riesgo o de cualquier otro tipo, te aconsejamos que tengas en cuenta algo más que el precio.

La importancia de las coberturas en un seguro de moto

Ya te lo hemos anticipado, pero volvemos a insistir: a la hora de contratar un seguro de moto el precio es importante, pero lo son aún más las coberturas que este incluye y que marcarán la diferencia en caso de accidente o cualquier otro tipo de incidencia relacionada con tu preciada moto.

Asistencia en viaje

Una avería, un pinchazo o un accidente pueden llegar en cualquier momento y contar con una asistencia en viaje completa es sumamente importante. De lo contrario, cualquier inconveniente, por pequeño que sea, se convertirá en un gran problema.

La cobertura de asistencia en viaje está, generalmente, asociada al servicio de grúa, pero no tiene porqué ser el único incluido en la misma. De hecho, puede cubrir también la reparación de la moto in situ, así como cubrir los gastos de hotel y desplazamiento en caso de ser necesario. Y, esto es importante, puede cubrir no sólo al conductor, sino también al acompañante.

Además, algunas pólizas de seguro no cubren desde el kilómetro cero, es decir, desde casa. Algunas sólo lo hacen a partir de un kilómetro concreto, por ejemplo, el 25, y todo lo que nos ocurra antes de esa distancia recorrida no incluirá asistencia gratuita de la grúa. Es algo a los que también debes prestar atención a la hora de contratar.

Eso sí, si tienes una moto con la que únicamente realizas trayectos cortos y mayoritariamente urbanos, es obvio que no necesitarás la misma cobertura que si acostumbras a hacer viajes largos. Valora tus hábitos y contrata en consecuencia.

Daños personales y materiales

Cuando contratas un seguro a terceros, en realidad lo que estás contratando es un seguro de Responsabilidad Civil. Es decir, que, en caso de accidente, dicho seguro sólo cubrirá los daños ocasionados por tu moto.

En un seguro a todo riesgo se incluyen todos los daños ocasionados en el siniestro, tanto del asegurado como de las posibles partes contrarias involucradas. Presta atención a los supuestos que pueden quedar excluidos, así como a las coberturas médicas e indemnizaciones configuradas para cada caso. Igualmente, valora incluir los daños personales de pasajeros que puedan viajar contigo en la moto.

A la hora de contratar tu seguro de moto, prioriza tus necesidades sobre el precio. La diferencia será escasa, pero las coberturas lo compensarán con creces.

Robo

Muchas personas dan por hecho que el seguro cubre el robo, pero lo cierto es que no siempre es así. Además, puede darse el caso de que sólo esté incluido en determinadas circunstancias. Un ejemplo de ello es que cubra el robo de la moto completa, pero no si únicamente te han robado un retrovisor o la cúpula.

También es importante conocer lo que el seguro te va a pagar en caso de robo, ya que algunas aseguradoras tienen en cuenta el valor venal de la moto y otras se guían por las tablas GANVAM (Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios).

Defensa jurídica

Hablamos ahora de una cobertura cuya contratación es casi obligada. La mayor parte de los seguros incluyen este servicio, pero las condiciones varían mucho en función de cada póliza. Lo principal a tener en cuenta es:

• Cuantía máxima de la cobertura.
• Posibilidad de contratar un abogado ajeno a la aseguradora.
• Cobertura en caso de accidente en el extranjero.

Detalles como estos marcan la diferencia entre contratar algo que no sirve prácticamente para nada o contar con un servicio realmente útil cuando hace falta.

Precio

Ya hemos dicho al principio que, en ocasiones, cometemos el error de guiarnos por el precio a la hora de contratar un seguro. Pero eso no significa que no debamos tenerlo en cuenta.

Una vez conocidas todas las coberturas y la amplitud de las mismas, lo mejor es comparar todo ello con el precio que cada compañía presupuesta para encontrar la que nos ofrezca una mejor relación calidad/precio.

Otras coberturas interesantes

Aunque las coberturas anteriores son las más relevantes a la hora de contratar un seguro de moto, existen otras complementarias que también ofrecen las compañías aseguradoras y que pueden resultar muy útiles en tu caso.

Hablamos, por ejemplo, de la cobertura por incendio o desastres naturales como rayos, inundaciones, etc. También de gestión de multas o un servicio muy apreciado por quienes utilizan su vehículo a diario para trabajar o realizar tareas importantes: la moto de sustitución. Todo ello influirá en el precio, así que valora y compara antes de elegir. Sólo así acabarás contratando el mejor seguro posible para ti y tu moto.

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