ComparativaToyota GT86 vs Subaru BRZ ¿Cuáles son sus diferencias y cuál elegir?
El Toyota GT86 y el Subaru BRZ son algo más que hermanos de sangre: Ambos salen de la factoría que Subaru tiene en Gunma y comparten casi todo. A la hora de decantarse por uno u otro no queda más remedio que fijarse en los pequeños detalles que los diferencian ¿Cuál es la mejor compra?
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Publicado: 05/11/2012 08:00
Aparentemente el Toyota GT86 y el Subaru BRZ son como dos gotas de agua. Ambos surgen como el primer modelo de la alianza de colaboración que ambas marcas firmaron en 2005 y comparten casi todo: Motor, transmisiones, frenos, propulsión trasera, llantas, línea exterior, diseño interior e incluso precios de venta.
Por eso, los pequeños detalles que los diferencian son más importantes que nunca para decantarse por uno u otro. Tras probar el GT86 y el BRZ, en Motor.es hemos sacado la lupa para buscar en qué se distinguen y decidir cuál es la mejor opción de compra entre este Toyota y Subaru.
Diferencias mecánicas
En el apartado mecánico, la única disparidad existente entre el GT86 y el BRZ es el tarado de las suspensiones. El modelo de Toyota presenta una suspensión delantera más blanda que la del Subaru y, por el contrario, en el eje trasero el tarado es más firme.
Toyota asegura que se ha decantado por esta opción para que sea más fácil el sobreviraje, buscando maximizar el placer de una conducción deportiva. Por su parte, Subaru ha preferido que el aplomo y la estabilidad sea la nota predominante en el comportamiento de su BRZ. El resto de elementos permanecen sin cambios entre ambos coches.
Diferencias en el diseño exterior
Si bien técnicamente no hay apenas desigualdades entre los dos coches, las discrepancias cosméticas son más numerosas. En el exterior, casi todas las diferencias se concentran en la parte delantera. Para empezar, el paragolpes frontal es distinto: El GT86 tiene un diseño más agresivo con una gran entrada de aire trapezoidal mientras que el BRZ presenta una forma similar pero invertida.
A ambos lados de la entrada de aire principal se sitúan los faros antiniebla delanteros, que también están dispuestos de una forma diferente.
Los faros delanteros también son distintos: El contorno de los faros del GT86 son más alargados hacia el centro del coche. La distribución interior de las luces dentro del faro también es distinta.
Si nos vamos al lateral de ambos coches, la única diferencia se percibe en la salida de aire simulada que se encuentra en la aleta delantera. En el caso del BRZ la rejilla es grande y está atravesada por una franja del mismo color de la carrocería. El GT86 se conforma con una pequeña salida de aire y el logo del modelo (dos pistones enfrentados que recuerdan su motor bóxer, con el número 86 en el centro).
En la siguiente imagen vemos la parte delantera de modo que podemos apreciar las diferencias de los paragolpes en la vista lateral y las entradas de aire de la aleta. También podemos comprobar que las llantas de aleación de 17 pulgadas son exactamente las mismas (salvo el logo, obviamente). En cuanto a la trasera, ambos coches son idénticos, excepción hecha de sus respectivos logotipos.
Diferencias en el diseño interior
Una vez más, a primera vista parece que ambos coches son idénticos. Pero si nos fijamos bien, la primera diferencia que nos llama la atención es el panel decorativo que recorre el salpicadero: En el Subaru es de color plateado mientras que en el Toyota esta pieza es negra y presenta unos patrones en forma de “T”.
Los sistemas de navegación también son diferentes ya que el equipo JBL del Toyota GT86 tiene otro diseño y otros mapas que el presente en el Subaru BRZ.
Otra discrepancia clara la encontramos en el cuadro de instrumentos. La distribución y forma general de la instrumentación de mantiene inalterada en ambos coches, pero los colores, las agujas y las grafías son distintos. El GT86 tiene un diseño más deportivo con una franja de color blanco en el cuentarrevoluciones y, una vez más, los patrones en forma de “T”.
La parte central del volante muestra un bordado simulado en el caso del Toyota GT86 que el Subaru BRZ no tiene.
La tapicería de los asientos es idéntica en ambos coches salvo por un pequeño detalle: Una franja que recorre el respaldo de los asiento del GT86, ausente en el BRZ, y que nuevamente muestra el motivo de las “T” dibujadas.
Las alfombrillas son otro elemento discordante entre ambos coches. El Subaru tiene unas alfombrillas con un diseño de líneas longitudinales y el nombre “BRZ” en color blanco mientras que el Toyota recurre una vez más a los patrones en forma de “T”, el contorno tiene puntadas de color rojo y sitúa el logo del GT86 en una esquina.
Y para terminar el repaso de diferencias entre ambos modelos nos fijamos en el retrovisor interior. Aquí, el Toyota se muestra más original quedando el cristal “al aire” en contraste con el Subaru que opta por un retrovisor de diseño más tradicional.
En definitiva ¿Cuál elegir?
Habiendo probado los dos coches tanto en sus versiones con cambio manual y automática, os recomiendo encarecidamente que os decantéis por la variante con cambio manual. La transmisión automática es muy buena pero el manual es sencillamente perfecto. Encaja como anillo al dedo en la filosofía del coche y además nos ahorramos los 3.500 euros que cuesta de más el automático. Sobre el acabado, elegir el mayor disponible ya que la diferencia de precios no es elevada teniendo en cuenta todo el equipamiento extra que se añade: Compensa el desembolso.
En cuanto al comportamiento en carretera, la única diferencia del tarado de las suspensiones apenas es apreciable. El eje trasero del GT86 es algo más seco al pasar por irregularidades del asfalto y me ha parecido que el BRZ ofrece un mejor compromiso entre comodidad y estabilidad aunque, repito, las diferencias son realmente pequeñas en la conducción diaria.
El diseño frontal del Toyota me parece más logrado, tiene un aspecto más agresivo. También se aprecia esta sensación en el cuadro de instrumentos, excesivamente sobrio en el caso del Subaru. Al fin y al cabo, la atmósfera «Racing» es algo muy importante en el interior de un coche deportivo ¿verdad?
En definitiva, el Toyota GT86 y el Subaru BRZ son casi el mismo coche y las diferencias entre los dos son tan pequeñas que con ambos acertaremos seguro siempre que busquemos un deportivo que prioriza el comportamiento dinámico y la diversión al volante. Pero hay que decantarse por uno…
Quizá me quedaría con el GT86 porque sus pequeñas diferencias de diseño le hacen más atractivo, más agresivo. También es preferible porque la red de talleres oficiales de Toyota es mucho más numerosa que la de Subaru, lo cual resulta más cómodo a la hora de pasar las revisiones de mantenimiento. Tengo claro que iría muy feliz y decidido a un concesionario de Toyota a reservar uno… pero en el último momento volvería sobre mis pasos y entraría en un concesionario de Subaru.
El Subaru BRZ puede ser un poco soso en cuanto a algunos detalles pero cuenta con la ventaja de disponer en su catálogo el color de carrocería WR Azul Mica, exclusivo de la marca. Es éste el color que debéis elegir, ni lo dudéis, porque es como un traje hecho a medida para el deportivo japonés. Realza cada una de sus líneas, refleja deportividad y elegancia a partes iguales.
La marca Subaru añade un plus de exclusividad. Vale, ya sé que no vas a encontrar miles de BRZ y GT86 por las calles pero seguramente se vendan más Toyota que Subaru y reconozcamos que si uno tiene un deportivo le gusta que sea un coche poco visto. También lo prefiero por suspensiones y aunque las diferencias son muy leves en este aspecto sólo cabe decir que el aplomo del BRZ es excepcional.
Subaru BRZ con acabado Executive, cambio manual de seis velocidades y color WR Azul Mica por un precio de 32.400 euros. No hay dudas, el corazón y la cabeza apuntan que éste debe ser "el elegido". Habrá que empezar a ahorrar. Y tú, ¿con cuál te quedarías?
