La continuidad de Glickenhaus en la categoría hypercar del WEC peligra de cara a 2024

La categoría hypercar del WEC goza de una extraordinaria salud. La presencia de Toyota, Ferrari, Peugeot, Porsche y Cadillac así lo demuestra, como también la llegada de Alpine y Lamborghini en 2024. Sin embargo, no todos los proyectos presentes en la categoría reina del Mundial de Resistencia tienen detrás un gran fabricante y eso también se nota en sus cuentas. De hecho, Glickenhaus podría desaparecer de la parrilla del WEC 2024 si no obtiene fondos adicionales.

Glickenhaus desarrolló su SCG 007 LMH para competir en la nueva era de la resistencia y fue el único rival de Toyota en los primeros compases de la clase hypercar -con permiso de Alpine y su LMP1-. Una circunstancia que ahora juega en contra del pequeño fabricante americano, ya que su prototipo LMH no híbrido empieza a acusar su veteranía frente a las propuestas más modernas de fabricantes con un mayor presupuesto.

El SCG 007 LMH se puede considerar el prototipo más viejo de la parrilla, ya que el Toyota GR010 Hybrid ha recibido actualizaciones

Por este motivo, la continuidad de Glickenhaus en el WEC empieza a estar en duda. De hecho, el propio Jim Glickenhaus ha asegurado que el equipo necesita una inyección de presupuesto sustancial para desarrollar, actualizar y probar su SCG 007 LMH con el fin de ser competitivo. Desde el equipo existe no quieren ser una comparsa y mantenerse en la clase reina del WEC a cualquier precio. No están dispuestos a ser carne de cañón.

Al final, el Glickenhaus SCG 007 LMH se puede considerar el prototipo más viejo que existe en la parrilla del Mundial. Aunque tiene la misma edad que el Toyota GR010 Hybrid, el fabricante japonés sí dispone del presupuesto para actualizar su prototipo y así lo ha hecho antes del inicio de las temporadas 2022 y 2023. Mientras tanto, Glickenhaus tiene que lidiar con la falta de test y un limitado número de actualizaciones para su prototipo.

Factor limitante

Jim Glickenhaus ha sido bastante claro al respecto: «Mucho de lo que podamos hacer va a depender exactamente de la llegada de un patrocinador. Nuestro coche tiene ya tres años. Para ser competitivos necesitaría una actualización seria. Eso implica también hacer pruebas. Necesitaríamos una adicción de presupuesto sustancial. Sentimos que, sin eso, no podemos ser competitivos».

«No deja de ser sorprendente que nuestro prototipo de tres años todavía pueda pelear, de algún modo, contra los mejores y más brillantes fabricantes. Cuentan con vehículos más nuevos y no estamos tan lejos. La idea de que en Le Mans pudimos batir a Porsche es increíble. Ganar a Peugeot también fue algo notable y ciertamente no fuimos un comodín. No fue una broma» añade el patrón de Glickenhaus.

Situación delicada

«Realmente, si conseguimos patrocinadores que nos permitan desarrollar el coche y seguir adelante, queremos hacerlo. Sería emocionante. Si no lo conseguimos, no hay problema. Lo que no queremos es seguir para ser carne de cañón. Las carreras sirven para vender coches, pero el presupuesto del WEC para nuestra compañía, con la capacidad que tenemos para producir coches, no tiene ningún sentido» explica Jim.

«Tiene sentido para los grandes fabricantes que venden millones de vehículos al año. Sin ir más lejos, Ferrari vende entre 13.000 y 20.000 coches al año. Lamborghini también le verá sentido, pero no creo que para un pequeño equipo privado como el nuestro tenga ningún tipo de sentido económico» señala el patrón de un equipo Glickenhaus que todavía no está claro ni siquiera que vaya a competir en Fuji y Bahrein este año.

Fuente: SportsCar365Fotos: Glickenhaus