Un Corvette 1964 robado aparece en perfecto estado 40 años después

Corvette C2 1964 coupe. Imagen de archivo.

Desde los Estados Unidos nos vuelve a llegar una de esas curiosas historias de modelos robados que son recuperados décadas más tarde. En esta ocasión, un Corvette C2 de 1964 era sustraído en 1976 en una población de California, ejemplar que nunca se llegó a recuperar pero que ahora, justo 40 años después, vuelve a aparecer. Y lo mejor, el clásico deportivo se encuentra en perfecto estado.

Esta tiene todos los ingredientes para ser una gran historia, con final feliz incluido, si no fuera porque realmente no lo es.

Cuando aparecen este tipo de anécdotas, automáticamente imaginamos a un propietario feliz y sorprendido tras recuperar su perdido tesoro de manos de la policía, lo que induce a pensar básicamente que el bien ha triunfado sobre el mal. Sin embargo, como en esta, en muchas ocasiones eso no sucede.

El flamante C2 del 64 de color blanco de las imágenes no ha sido recuperado de manos de los ladrones o de sus cómplices, sino del que hasta ahora había sido el orgulloso propietario del Corvette desde hace casi 20 años. Este es la segunda víctima inocente del robo original, y que por norma general, no suelen ser tomadas en consideración en estos sucesos.

La propietaria original en el encuentro con su vehículo.

El vehículo ha logrado ser recuperado gracias a que una persona con conocimientos en la codificación de los números de bastidor del Corvette, durante un evento, identificó el número de chasis como perteneciente a un Impala de 1964. Tras esto, procedieron a revisar el resto de números de serie de los elementos mecánicos del modelo, hasta que lograron identificarlo como el Corvette robado en 1976 en Annaheim, California.

Una vez se pusieron en contacto con las autoridades y el vehículo fue verificado, procedieron a entregárselo a su legítimo propietario. Una mujer apellidaba Fleming.

Actualmente, el que hasta hace poco era el propietario del Corvette se ha quedado sin el vehículo y lo que es peor, sin poder reclamar a nadie, ya que este había sido comprado por su mujer en 1987 como regalo para su marido, en un establecimiento que a día de hoy está cerrado. Por lo que intentar trazar el recorrido del Corvette desde que fuera robado va a resultar tremendamente complejo.

Lamentablemente, esto suele suceder en muchas ocasiones. Años después de haber sido robados, aparecen los vehículos ya en manos de otros propietarios y en algunos casos, concesionarios, que han sido engañados mediante sistemas tales como documentación falsa o números de bastidor modificados. También es normal recuperarlos incluso en otros países. En esos casos, por norma general, no hay reclamación posible por parte de los afectados.

El ya célebre Corvette desaparecido.

Las imágenes del modelo no nos permiten apreciar con claridad el estado completo del modelo, que parece bueno a simple vista, por lo que su valor actual puede esta entre los 28.000 dólares de un ejemplar en estado aceptable y los 65.000 de una unidad en estado de concurso.

Estos valores son aplicables a un ejemplar de carrocería coupé en su variante más básica, equipado con la opción V8 327, de 5.4 litros y unos 250 caballos. No hay información sobre la versión concreta o la configuración exacta del ejemplar, por lo que resulta imposible ser más específicos.

La gama 1964 del Corvette estaba compuesta por dos carrocerías, coupé y convertible. Y las mecánicas disponibles eran cuatro, todas ellas bloques V8 de 5.4 litros, con potencias entre los 250 y los 375 caballos.

En el caso de haber sido un ejemplar del modelo anterior, model year 1963, el precio actual hubiera sido radicalmente diferente. Ya que esos ejemplares contaban con la luneta trasera dividida en 2 partes, lo que les da el sobrenombre "Split Window". Estos actualmente tienen un valor, también en su variante más básica entre los 48.800 y los 124.000 dólares.

Corvette C2 1963 'Split Window'.

Por esto, las unidades de 1963, el primer modelo de la segunda generación del Corvette son tan apreciados y por tanto valiosos. En el caso del ejemplar que nos ocupa, esto poco importa, ya que si bien alguien ha logrado recuperar su clásico, simultáneamente otro lo ha tenido que perder, y además tras pasar la seguramente vergonzosa situación de descubrir, en público, que su amado vehículo era robado. Y sin poder reclamarle nada a nadie, ni tan siquiera a su aseguradora.

Fuente: Red Bluff Daily News vía C&D