¿Cuánto valdrá un Fórmula E de segunda generación?

La Fórmula E cada vez está más cerca de su primera gran revolución. La temporada 2018-19, conocida en el argot del campeonato como 'Season Five', será la primera en la que no haga falta cambiar de monoplaza en mitad de la carrera. Esto es posible gracias a la llegada de la segunda generación de monoplazas eléctricos Spark, toda vez que vienen equipados con un nuevo conjunto de baterías firmado por McLaren Applied Technologies, baterías que permiten completar un ePrix completo sin necesidad de cambiar de coche, lo que ha sido el reclamo definitivo para que casi una decena de fabricantes se involucren en el campeonato.

A pesar de la presencia de fabricantes como Nissan, BMW, Audi, Mahindra, DS y de la llegada de otros fabricantes como Mercedes o Porsche en el futuro, una de las premisas de los promotores de la Fórmula E es evitar una escalada de precios en el desarrollo de componentes que pueden ser genéricos, como es el caso del propio chasis construido por Spark. Es por ello, que Fórmula E y FIA han desvelado los precios máximos que deberán tener los distintos componentes de un monoplaza de Fórmula E. Cabe recordar que los actuales monoplazas tiene un precio en torno a los 480.000 euros por unidad.

Teniendo en cuenta que se va a reducir a la mitad el número de coches -dos por equipo- en la 'Season Five', cada monoplaza de Fórmula E tendrá un precio de 817.300 €, casi el doble de lo que valen los coches actuales al existir un desarrollo más exigente en las baterías, unidades de potencia, transmisiones o del propio chasis. En este aspecto hay que tener en cuenta que hay límites presupuestarios para ciertos componentes. Las baterías McLaren cuestan 200.000 €, el chasis Spark asciende a 299.600 €, mientras que el halo no podrá superar los 12.700 €. Por último, la unidad de potencia no podrá costar más de 250.000 €.

Fotos: FIA Fórmula E