Tras conquistar a los europeos, CUPRA pone su mirada en Estados Unidos de la mano de un potente socio

CUPRA lleva entre nosotros como marca independiente en el Grupo Volkswagen desde el año 2018. Desde entonces, ha logrado colocar 750.000 vehículos a nivel mundial y se ha expandido más allá de Europa a mercados como el de México, Turquía o la lejana Australia.

Su gama de vehículos no deja de crecer desde que se presentase hace ya más de un lustro como los CUPRA Ateca y CUPRA León como primeros protagonistas. Ahora tenemos en el catálogo de la marca modelos de combustión, híbridos enchufables y cien por cien eléctricos, con el Terramar como su última gran novedad.

Pero CUPRA quiere más: desde Barcelona para el mundo, sus aspiraciones de ser una marca global pasan ahora también por conquistar uno de los tres grandes mercados automovilísticos: en Europa no deja de crecer, China parece un sueño imposible y Estados Unidos ahora convence más que nunca.

CUPRA cruzará el gran charco en 2030

Las intenciones de CUPRA son las de aterrizar en Estados Unidos cuando termine la presente década. Hace años que se habla de esta opción y, por entonces, tan solo eran sondeos los que la marca estaba llevando a cabo.

Ahora la cosa parece más seria, ya que ha sido la propia marca española, a través de su CEO Wayne Griffiths, la que confirma que están en conversaciones preliminares con Penske Automotive Group para «explorar una alianza en Estados Unidos».

Esta firma norteamericana, fundada hace 34 años, podría convertirse en el aliado perfecto y en el distribuidor de CUPRA en el gigante norteamericano, a donde llegarían tanto los modelos de combustión como los electrificados de la marca.

Antes de seguir moviendo fichas, CUPRA ha decidido nombrar a Bernhard Bauer, antiguo director oficial de CUPRA en Alemania, como nuevo director general de la marca para Estados Unidos.

«La ambición de CUPRA es ser una marca realmente global y la expansión a Estados Unidos representa uno de los mayores hitos en nuestro camino. Sentimos un gran respeto por el mercado estadounidense y somos conscientes que una estrategia sólida de distribución y ventas es esencial para el éxito. El liderazgo de Penske Automotive Group en el sector y su experiencia con el Grupo Volkswagen hacen que sea una posible alianza muy prometedora», comentó Wayne Griffiths, CEO de CUPRA.

Qué podemos esperar de CUPRA en Estados Unidos

CUPRA no llegará a Estados Unidos hasta el 2030 y lo hará, llegada la fecha, a determinados estados clave que «estén alineados con la marca», aseguran. Además, se espera que se produzca allí uno de sus vehículos, en una de las fábricas de VW en la región.

Su sede y su gama específica de modelos todavía no se han anunciado, pero esto será un aspecto importante. CUPRA confía en convencer al público norteamericano con su diseño y su rendimiento, pero no cabe duda de que el tamaño será un factor fundamental.

A los conductores de allí les gustan los coches grandes, y actualmente el modelo de mayores dimensiones es el CUPRA Tavascan, el primer SUV coupé eléctrico de la compañía, con 4,64 metros de largo. ¿Serán suficientes para el público estadounidense?