«Me preocupa España, no está preparada para los coches eléctricos», Wayne Griffiths reconoce que el país es un problema para el futuro de CUPRA

El importante descenso que sufrió la demanda de coches eléctricos en la segunda mitad del pasado año está haciendo mella en los fabricantes. Hace unos días que el gran jefe de Mercedes reconoció haber sido muy optimistas con la implantación de este tipo de propulsión que, a día de hoy, no convence a los clientes ni por precio, no por autonomía o tiempos de carga, y no solo en la categoría de lujo. Los esfuerzos se han intensificado ahora en los segmentos más bajos del mercado.

Ahora, otro de los grandes de la industria ha saltado a la palestra con unas declaraciones sobre España pero en la misma línea que los de la estrella. Wayne Griffiths dirige CUPRA, la escindida marca deportiva de SEAT dedicada a los coches eléctricos de gran volumen y los que tienen prioridad desde su fundación. La firma solo cuenta a día de hoy con el Born, un compacto con un tinte más prestacional que acaba de estrenar la versión VZ con más de 320 CV, y que aguarda la llegada del Tavascan prevista para esta primera mitad del año.

CUPRA no ve con buenos ojos la demanda de eléctricos en España

El gran problema de Griffiths no es el mercado europeo, sino España en particular. El alto cargo ha reconocido que «A partir del año que viene, aproximadamente la mitad de mi empresa fabricará coches eléctricos. Aún no hay mercado para esto en España y eso me preocupa. El año que viene fabricaremos vehículos eléctricos, pero ¿para quién? Es sólo el 5 por ciento del mercado». El británico sabe perfectamente que los clientes españoles no están interesados en los coches de cero emisiones, con una cuota de ventas diez puntos por debajo de la media europea.

Lo que es un verdadero problema no solo para los intereses de CUPRA, sino también para Volkswagen, y especialmente para la gran factoría de baterías que se está construyendo en Sagunto, Valencia. La otra instalación se encuentra en Alemania y estará lista para suministrar baterías a todas las marcas del grupo en 2025, dos plantas en las que se han invertido más de 20.000 millones de euros, pero sobre las que planea una larga sombra. Las factorías alemanas de Volkswagen vienen sufriendo paros temporales en los últimos meses por falta de demanda de coches eléctricos, por lo que la planta de baterías en España puede, incluso no estrenarse.

España es un problema para CUPRA y sus coches eléctricos

El mandatario de SEAT y CUPRA ya ha lanzado varias piedras al tejado del Gobierno de España, de quien solo ha obtenido una respuesta: cambiarán el plan MOVES III pero del que no se sabe ni cuándo ni cómo serán las nuevas ayudas a la compra de coches eléctricos. La situación también tendrá consecuencias en CUPRA, pues la marca se verá obligada a redefinir sus estrategias y objetivos de ventas, pues está claro que Griffiths no cuenta con España en las ganancias generadas por la venta de coches eléctricos. Al menos, a corto y medio plazo.