¿Dacia echa el freno en Europa?

La semana que viene Dacia afrontará un cambio en su cúpula, retirándose del cargo de CEO el señor Nicolas Maure en favor de Yves Caracatzanis. El nuevo ejecutivo, curtido en Renault, tiene por delante el desafío de no perder el fuelle de Dacia en el mercado europeo. Venden más, pero pierden cuota.

En 2015 se vendieron, combinando la Unión Europea con los países EFTA, un 9,1% más de turismos que en 2014. Sin embargo, Dacia solo creció un 5,1%, por lo que su trozo de tarta disminuyó de un 3,7% a un 2,7%.

Una de las causas que explican la desaceleración es la propia gama de producto. Hubo un momento reciente en que Dacia presumía de tener la gama más fresca del mercado, con casi todos sus modelos recién sacados o recién actualizados, pero unos pocos años pesan mucho ya en un coche moderno. Ahora el problema es el inverso, sus coches están ya muy vistos, y algunos clientes se escapan a otras marcas.

El Dacia Duster empieza a acusar su veteranía, con un aumento de ventas en 2015 de "solo" un 1,8% el año pasado. Estamos hablando del tercer SUV más vendido del mundo en 2014, que se dice pronto. Es más, el Duster tiene un peso de casi un tercio de las ventas de Dacia, así que si el Duster flojea, la marca entera se da cuenta.

Esperamos el reemplazo en 2017, y de momento sabemos esto sobre él:

Básicamente, esperamos un modelo completamente nuevo que se beneficie de las mejoras de la nueva plataforma del grupo Renault Nissan, la CMF.

También debemos analizar el momento en el que nos encontramos. Europa vuelve, poco a poco, a la normalidad, y los mercados vuelven a crecer en matriculaciones sin necesidad de estímulos económicos -salvo España, donde aún persisten. Ahora es posible gastar con un poco más de alegría.

La gama Dacia empezó con un enfoque eminentemente esencial en 2005. De hecho, se pensó más para población inmigrante o de bajos recursos. Pero los hechos hicieron reaccionar a Dacia, se estaba convirtiendo en un éxito de la clase media. Poco a poco, Dacia tuvo que subir hacia arriba en materia de calidades o equipamiento.

Ahora mismo Dacia ofrece "lujos" como volante de cuero bovino, navegador o conectividad Bluetooth, impensables en su gama de 2005. Y la mayoría de los coches que venden no están tan "pelados" como las versiones Base. Si quiere recuperar terreno, debe elevar un poco más sus ambiciones y llegar a clientes con más dinero.

Incluso la publicidad de Dacia ha estado orientada a la compra inteligente, nada superfluo, como una pieza del Duster en la que una pareja no se lo compra porque no pueden gastar tan poco. Tal vez es el momento de cambiar esa mentalidad.

No solo se trata de renovar el Duster, sino de ampliar la gama de modelos. Ahora mismo consta del subcompacto Sandero, el sedán compacto Logan, el SUV Duster, el monovolumen Lodgy y el comercial Dokker. Coches más grandes pueden ayudar a ganar cuota. De momento no esperamos que llegue el Kwid -más pequeño- a Europa.

Dacia va a trabajar en mejorar el conocimiento de la marca entre el público, no solo incidiendo en el bajo precio como leit motiv. También pretenden que la gente conozca más su gama, y valoren si encaja con su estilo de vida, además del presupuesto.

Las mismas fórmulas no funcionan por tiempo indefinido

De todas formas, Dacia ha vendido siempre más que el año anterior, salvo en 2011. Por lo tanto, hablamos de nueve ejercicios subiendo de ventas de un total de 10. La previsión para 2016 es también de crecimiento, pero de forma más tímida. En 2017 el nuevo Duster debería acelerar las ventas un poco.