El Dakar 2021 tendrá su particular 'revolución' entre las motos

Las trágicas muertes de Paulo Gonçalves y Edwin Straver en el Dakar 2020 han precipitado una auténtica revolución en la categoría de motos del rally-raid más exigente y duro del mundo. Bajo la premisa de acabar con la consecución de etapas de alta velocidad y recuperar una parte de ese espíritu aventurero perdido, la 43.ª edición de la prueba contará con una ruta más técnica y lenta en la que la navegación tendrá un papel mucho más importante. El objetivo es reducir las elevadas velocidades medias que se han dado en las últimas ediciones del rally con el fin de mejorar la seguridad, algo que debe lograrse sin reducir el espectáculo.

A nivel técnico, el equipo de David Castera ha definido un conjunto de normas que obligará a los pilotos más fuertes a controlar su ritmo por una cuestión de mera supervivencia. En esta línea, sólo se permitirá un cambio de pistón del motor en todo el rally, aplicando sanciones de 10 minutos cada vez que se exceda esta cifra. Hasta ahora, los equipos punteros cambiaban de pistón casi todos los días. También habrá una limitación de neumáticos, ya que los 'motards' sólo podrán usar seis juegos de gomas traseras en todo el rally. Cada neumático trasero nuevo adicional, el piloto recibirá 30 minutos de penalización.

Tampoco se podrán aprovechar los repostajes para reparar elementos de las motos dañadas y no será posible intercambiar neumáticos y otro tipo de componentes con los compañeros de equipo y mochileros, aunque esto rompa con la filosofía del Dakar. A esto se sumará un extra de dificultad en la propia navegación ligado al estreno del 'roadbook' electrónico y a la entrega del libro de ruta minutos antes de comenzar algunas de las etapas del Dakar. Este 'roadbook', a medio camino con el sistema digital de los coches y camiones, sí que incluirá alertas acústicas específicas. Por último, debutará el chaleco con airbag incorporado con tecnología importada de MotoGP y hasta dos activaciones.

Fotos: Red Bull Content Pool