IndyCarDallara 'regala' dos kits aerodinámicos a cada piloto para empezar 2018

La introducción de un paquete aerodinámico unificado para todos los equipos de la IndyCar en 2018 se planteó con el objetivo de reducir las diferencias de rendimiento entre equipos, facilitar los adelantamientos, hacer los coches más difíciles de pilotar y más atractivos a nivel visual y publicitario, y reducir la cantidad de piezas que se desprenden del vehículo en un accidente. Pero el principal interés para los equipos de la categoría era reducir los insostenibles costes de los kits de fabricantes, y dichos equipos eran reticentes a tener que adquirir nuevos kits si no suponían un ahorro considerable.

Por ello, la IndyCar trabajó duro con Dallara y los dos fabricantes de motores (Chevrolet y Honda, encargados hasta este año de desarrollar los aerokits) para ofrecer un precio notablemente reducido en el coste que supone un kit a cada equipo, pero dicho esfuerzo ha resultado en un respiro e incentivo adicional para las cuentas de los equipos. Debido a la cooperación de los fabricantes y la inesperada ayuda de la Corporación para el Desarrollo Económico de Indiana (IEDC), la IndyCar ha anunciado que se suministrarán dos kits aerodinámicos de forma gratuita a los equipos por cada coche que alineen durante toda la temporada.

La IEDC, una asociación pública parcialmente financiada con fondos privados creada por el estado de Indiana con el objetivo de impulsar los activos económicos de la región, busca con esta medida apoyar la importancia de la IndyCar en general, y de las 500 millas de Indianápolis en particular, en la economía del estado, con particular énfasis en el tejido industrial de Indiana, clave para la categoría como lo es el de Carolina del Norte en la NASCAR. El ahorro neto de esta medida se puede calcular con el rebajado coste de los aerokits de 2018.

Frente al coste estimado de entre 125.000 y 165.000 dólares (entre 105.000 y 140.000 euros al cambio actual) que suponían los kits específicos de los fabricantes, además de los 15.000 dólares (12.000 euros) de cada actualización aerodinámica anual, el paquete unificado tendrá un coste fijado de 90.000 dólares (76.000 euros). No obstante, el rediseño del aerokit implica unos costes adicionales que no estarían incluídos en la gratuidad de los dos aerokits, debido a un nuevo paquete de componentes electrónicos diseñado por Cosworth, que incluye un nuevo colector de datos, cajas de conexión y montaje, cableado, la unidad de distribución de energía, una actualización de la batería y el nuevo conducto de entrada de aire para el turbocompresor.

A ello hay que sumarle algunas modificaciones en el habitáculo y el fondo plano, y una nueva pantalla LCD para cada volante (siempre y cuando no se elija una opción más cara que permite adquirir un nuevo volante). Todos estos gastos se aplican a cada uno de los kits utilizados durante el año. El coste total, que se acercan a los 120.000 dólares por cada kit, puede financiarse a tres años, resultando en un coste final de cerca de 40.000 dólares (35.000 euros) por kit, incluído los gratuitos, y que elevaría el precio de cada kit normal hasta los 130.000 dólares (110.000 euros).

Pese a ello, la categoría estima que, en base al ahorro que supondrán unas partes aerodinámicas mucho más baratas de reemplazar y los dos chasis gratuitos, cada equipo gastará 200.000 dólares (170.000 euros) menos la próxima temporada, un número ayudado por la decisión de retrasar la introducción de la nueva centralita de McLaren hasta 2019. Hasta el momento, cuatro equipos (Penske, Ganassi, Carpenter y Schmidt) han tenido la oportunidad de probar el nuevo aerokit en los test de Dallara, y el fabricante italiano planea enviar distribuir los componentes a cada equipo a finales de este mes, para que los equipos tengan tiempo de tenerlo todo a punto para la apertura del periodo oficial de tests el día 8 de enero.

Fotos: IndyCar Media