Un concesionario alemán venderá las 200 unidades sin dueño del Dallara Stradale
El Dallara Stradale es uno de los superdeportivos más exclusivos del mercado. Presentado en 2017 como un modelo apto para circular en calle, el italiano no ha cumplido aún su ciclo de producción tras más de cinco años. Ahora, un concesionario alemán ha asumido el gran reto de colocar las unidades disponibles con un argumento de venta muy potente.
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Publicado: 20/01/2023 19:00
Las marcas de coches tienen su grupo de clientes, incluidas las más lujosas y exclusivas, cuyas ventas se superan año tras año a pesar de las circunstancias económicas mundiales. Sin embargo, para algunos fabricantes minoritarios esta tarea se convierte en un objetivo más complicado, pues no todos los superdeportivos entran por los ojos de los adinerados clientes. Es el caso de la italiana Dallara.
En 2017, presentó una verdadera bestia de los circuitos que, por primera vez, también estaba homologada para rodar en calle y en carreteras convencionales. El Dallara Stradale se convertía en una opción interesante para aquellos clientes que buscaban una diversión excepcional pudiendo acudir a un circuito, exprimir a fondo sus prestaciones, y volver a casa como si el paseo hubiese sido tan tranquilo como rodar por una carretera normal. Pero el chasis de carbono de la gran última creación de Giampaolo Dallara, junto con su impresionante aerodinámica, piden mucho más.
Dallara Stradale
Su motor de cuatro cilindros y 2.3 litros EcoBoost de Ford, que rinde una potencia máxima de 400 CV, junto con un peso en báscula por debajo de la tonelada, le permiten alcanzar los 100 km/h en solo 3,3 segundos y una velocidad punta de 280 km/h. Un argumento que tiene sobrada fuerza para conquistar, como también su precio: 205.000 Euros en Alemania. Pero no son demasiado sugerentes para conquistar a un tipo de cliente muy exigente con la deportividad.
Porque, de las 600 unidades previstas, solo se han vendido 400 y quedan 200 pendientes de dueño. Quizás el problema sea que el puesto de conducción de carreras, con su volante forrado en Alcantara, sea el verdadero problema al tener que desmontar el volante para poder acomodarse y salir de los asientos deportivos.
Ahora, Dörr, un concesionario multimarca de Alemania especializado en deportivos de alta gama, ha asumido el reto de vender estos dos centenares de unidades pendientes, que siguen disponibles tanto en versión coupé, Spider y como Barchetta sin parabrisas. Y para convencer a los interesados, se ha sacado un argumento muy interesante de sus mangas. Ha instalado el concesionario junto al circuito alemán de Hockenheim, con una unidad de prueba para que experimenten por qué el Dallara Stradale debe estar en sus garajes.
