La destacada irrupción, con matices, de GRT Grasser en el DTM

Lamborghini Squadra Corse ha realizado una decidida apuesta por tener un papel protagonista en el DTM. Tras competir en 2021 junto a T3 Motorsport, el brazo deportivo de la firma italiana ha recurrido a su equipo de confianza para pelear por grandes cosas en el certamen alemán. GRT Grasser ha irrumpido en la parrilla del DTM con cuatro unidades del Lamborghini Huracán GT3 Evo, a las que se sumaron dos unidades más alineadas por el propio equipo T3, si bien este proyecto ha terminado por sucumbir por cuestiones internas.

Además de contar con apoyo directo de Lamborghini, el equipo GRT Grasser tiene en nómina a cuatro pilotos con contrato directo con la marca o con una estrecha relación con el fabricante de Sant'Agata Bolognese. El italiano Mirko Bortolotti es la joya de la corona, el piloto GT3 de Lamborghini mejor valorado y que ha respondido a las expectativas con un desempeño realmente sólido que le ha llevado al liderato del DTM. Rolf Ineichen, Clemens Schmid y Alessio Deledda son pilotos de amplia experiencia en GT3, pero no están encontrando el camino para obtener los resultados deseados.

Como es lógico, Mirko Bortolotti se ha convertido en el gran representante de Lamborghini en el DTM: «Terminé en los puntos en siete de las ocho carreras disputadas hasta ahora. Estoy muy orgulloso de eso. Logré la primera pole de Lamborghini en el DTM y he estado cuatro veces en el podio. Voy carrera por carrera siempre con el mismo enfoque, dar lo mejor de mí mismo y lograr el mejor resultado posible. Ser líder de la clasificación a mitad de año es bueno, pero no significa nada y, por ahora, no estoy pensando en conseguir el título».

Pese a que no tiene ni un solo punto, Rolf Ineichen cree que su salto al DTM ha sido el paso correcto: «El DTM está siendo una experiencia nueva. Es diferente a todo lo que hacía antes. El coche con los neumáticos Michelin es algo a lo que me tengo que acostumbrar. Todo se siente más rápido y es agradable. Dar el salto al DTM fue el paso correcto. Sin embargo, en términos deportivos todavía tengo mucho trabajo por delante. El coche requiere un estilo de pilotaje diferente y aunque estamos mejorando cada fin de semana, todavía falta algo. Creo que podemos mostrar más».

Clemens Schmid está en una posición similar a su compañero: «Hemos aprendido mucho esta temporada, pero nuestro ritmo es mejor que los resultados. No tengo dudas. Tuvimos mala suerte en varias carreras y no terminamos de estar donde deberíamos estar. El fin de semana en Imola nos dejó buenas sensaciones. Queremos mostrar en la segunda mitad de año un mejor ritmo y estar entre los diez primeros. El nivel del DTM es extremadamente alto y para nosotros todavía hay margen de mejora. Espero con ansias los próximos desafíos».

Fotos: DTM