La DGT aprovechará la anulación de la regla de los 20 km/h para instalar más radares de tramo

La nueva Ley de Tráfico entró en vigor el pasado 21 de marzo y, de todas las novedades introducidas, seguramente la más polémica de todas ha sido la prohibición de rebasar en 20 km/h la velocidad máxima para adelantar en carreteras secundarias.

Esto hará que los adelantamientos sean mucho menos frecuentes y, cuando se realicen, tarden mucho más en ser completados por parte del conductor que realiza la maniobra. Algo que muchos estamentos y conductores han calificado de peligroso.

«Los automovilistas tienen que ser conscientes de que circulan por vías más peligrosas y, si quieren ir más rápido, deberán buscar alternativas»

Sin embargo, Pere Navarro, Director General de Tráfico y, por tanto, máximo responsable de la DGT, ha respondido a los críticos afirmando que «en ningún país de nuestro entorno existe este margen de 20 km/h en carretera. Disponer de él incita a adelantar, que es una maniobra de mucho riesgo que puede dar lugar a colisiones frontales».

Además, Pere Navarro ha anticipado que la DGT tiene previsto instalar más radares de tramo en las carreteras secundarias, ya que esta nueva medida facilita el uso de este tipo de controles de velocidad. «En 2019, los adelantamientos mataron a 239 personas. Y sí, eliminarlo puede favorecer en el futuro la instalación de más radares de tramo, más justos que los que están en un solo punto».

«Realizaremos un seguimiento durante el primer año y tendremos los datos sobre su eficacia. Y estos datos darán respuestas», reitera Navarro tras ser preguntado si se prevé reevaluar la medida tras las críticas recibidas.

Meses atrás, Jorge Ordás, subdirector de Movilidad y Tecnología de la DGT, apuntó que «los automovilistas tienen que ser conscientes de que circulan por vías más peligrosas y, si quieren ir más rápido, deberán buscar alternativas».

Los radares de tramo, altamente rentables

Según datos de la propia Dirección General de Tráfico, seis de cada 10 denuncias son tramitadas por radares y más del 50% de las mismas corresponden a radares de tramo.

Queda claro que este tipo de radares son muy efectivos a la hora de detectar infracciones por exceso de velocidad, ya que actualmente la DGT dispone de 92 radares de tramo, cifra que contrasta con los 688 radares fijos instalados en España. Además, el 70% de los radares de tramo están colocados en carreteras secundarias.

Este tipo de radar supone, según datos de 2019 (último año prepandemia), más de 2,2 millones de multas. La recaudación total, incluyendo todos los tipos de sanciones de tráfico, fue de 374 millones de euros.