Duelo extremo: Dodge Challenger Hellcat Redeye vs. Ferrari 812 Superfast [vídeo]

Que los norteamericanos y los europeos tenemos maneras muy distinta de entender el mundo del automóvil no es ningún secreto. La forma de vida y sobre todo, las cargas impositivas tan distintas que encontramos a ambos lados del Atlántico han provocado que el automóvil y su industria hayan evolucionado de manera radicalmente diferente en cada continente.

El último vídeo de la serie Head 2 Head de la publicación estadounidense Motor Trend nos muestra uno de los mejores ejemplos de las enormes diferencias que separan a europeos y norteamericanos en lo que a automovilismo se refiere, con un duelo que refleja a la perfección como interpreta cada pueblo conceptos aparentemente tan simples como el rendimiento o las altas prestaciones.

Por un lado nos encontramos el nuevo Dodge Challenger SRT Hellcat Redeye, uno de los muscle cars más poderosos y radicales que podemos encontrar actualmente en el mercado norteamericano y que además resulta ser de los pocos modelos disponibles que aún permanece fiel a la receta clásica del segmento, mucha potencia sobre un bastidor muy robusto pero técnicamente algo desfasado y por un precio bastante ajustado. Mientras que enfrente no podemos encontrar algo más opuesto, uno de los modelos más exclusivos, avanzados y prestacionales del segmento Gran Turismo, el Ferrari 812 Superfast, que hasta la llegada a los concesionarios del nuevo Ferrari SF90 Stradale sigue encabezando el catálogo de la firma de Maranello.

Estos modelos son radicalmente diferentes y no solo por concepto o el segmento al que pertenecen. Un solo vistazo a sus carrocerías revela gran parte de las diferencias que hay entre ambos, sin embargo, sobre el papel su rendimiento no es tan distinto como cabría esperar. De hecho, el modelo americano es ligeramente más potente gracias a su V8 de 6.2 litros sobrealimentado que entrega 808 CV (797 hp) y 958 Nm de par máximo, frente a los 800 CV (789 hp) y 718 Nm de par máximo del V12 de 6.5 litros atmosférico del modelo italiano.

Su poderosa mecánica impulsa de 0 a 60 mph (0-96 km/h) al Dodge en solo 3.4 segundos y le permite alcanzar una velocidad máxima de 326 km/h, frente a los 2.9 segundos que tarda el Ferrari en alcanzar los 96 km/h desde parado. De seguir acelerando, el modelo italiano es capaz de alcanzar una velocidad punta de 340 km/h. ¿Cómo se comportarán ambos sobre el asfalto de una drag strip?, para conocer el resultado tendréis que echarle un vistazo al vídeo inferior, que por otra parte es un documento gráfico indispensable para cualquier aficionado a los modelos de altas prestaciones.