La vetusta gama Challenger vence al Ford Mustang y lidera el segmento muscle car
El Dodge Challenger ha logrado romper el reinado absoluto del Ford Mustang en el segmento muscle car estadounidense al superar en ventas al pony car de Ford durante el tercer trimestre de este convulso año. De esta manera, el anticuado Challenger ha hecho morder el polvo a sus más modernos y tecnológicos competidores.
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Publicado: 07/10/2020 12:00
El caso del Dodge Challenger debería ser materia de estudio para las facultades de economía, sobre todo para aquellos estudiantes interesados en el campo del marketing. Pues el deportivo de Dodge es el mejor ejemplo de que los fundamentos teóricos no siempre se cumplen en el mundo real y que con la estrategia comercial adecuada un producto desfasado puede superar en ventas a competidores más frescos y tecnológicos.
Las cifras de ventas del segmento muscle car estadounidense en el tercer trimestre de este año dibujan un escenario que hubiera sido impensable para la gran mayoría de aficionados a este tipo de vehículos. La gama Dodge Challenger ha dominado con mano de hierro las ventas durante los meses de julio, agosto y septiembre, superando en cerca de 2.500 unidades al todopoderoso y hasta ahora imbatible Ford Mustang. El caso del Chevrolet Camaro es aún peor, pues hace ya tiempo que el deportivo de General Motors se descolgó de sus dos principales competidores.
Ventas julio-septiembre 2020
- Dodge Challenger 16.332 unidades
- Ford Mustang 13.851 unidades
- Chevrolet Camaro 8.366 unidades
Es evidente y desde hace ya bastante tiempo, que la estrategia de Dodge con las gamas Charger y Challenger es la más adecuada. Estos modelos llevan más de 10 años en el mercado sin cambios importantes, pues montan una plataforma cuyo origen se remonta a la época del Grupo DaimlerChrysler AG. La misma arquitectura LX de origen Mercedes que estrenó el Chrysler 300 en 2004. Sus rivales por el contrario se corresponden con generaciones más frescas y con un planteamiento tecnológico mucho más avanzado. Es conveniente recordar que el modelo de Dodge nació a finales de la década pasada para competir con la quinta generación de los Mustang y Camaro, que ahora están viviendo los últimos años de vida comercial de la sexta generación de ambos modelos. Por lo que el vetusto Challenger ha logrado adelantar a los sucesores de sus competidores originales, uno de ellos incluso con fecha de llegada para su relevo, el Mustang S650 que debería ser presentado en 2022.
Receta clásica
El secreto del Dodge Challenger es ofrecer a sus clientes un producto único, un muscle car al estilo clásico y no nos referimos a su estética de marcado carácter retro, sino a la propia composición técnica del modelo. Con enormes, potentes y baratos motores V6 y V8 combinados con esquemas de bastidor muy simples, como es el caso de su clásico eje rígido trasero, el último que queda en el segmento. Esto otorga a los usuarios una capacidad muy amplia para modificar sus ejemplares, a lo que se suma una enorme gama. El catálogo Challenger está compuesta por numerosas versiones de carácter deportivo, muchas ellas destinadas a competiciones amateur, que se complementan con un goteo constante de ediciones limitadas y las espectaculares versiones dotadas del motor V8 HEMI Hellcat, lo que supone atención mediática constante.
Por lo que el Challenger dispone de una oferta inigualable para los clientes de ese mercado, que en muchos casos ven al Mustang y al Camaro como deportivos más caros y complejos, carentes del sabor del segmento muscle car tradicional.