Dodge y Chrysler en serios problemas, necesitan con urgencia nuevos modelos

El proceso de fusión de Fiat Chrysler Automobiles (FCA) con el Groupe PSA está más cerca de culminarse. Una vez se materialice la unión de estas dos compañías se dará vida a Stellantis, el cuarto mayor fabricante de automóviles a nivel global. En el momento que ambos grupos se transformen un mastodonte de la industria automotriz deberán ponerse manos a la obra para solucionar algunos de los numerosos problemas que trae consigo FCA.

En estos momentos FCA es uno de los conglomerados automovilísticos con un mayor número de marcas. Abarth, Alfa Romeo, Chrysler, Dodge, FIAT, FIAT Professional, Jeep, Lancia, Maserati, Mopar, RAM, SRT, Comau y Teksid. Son unas cuantas firmas, y no pocas tienen problemas que solventar. Vayamos un paso más allá y pongamos exclusivamente el punto de mira en Dodge y Chrysler.

Si algo ha caracterizado a estas dos marcas estos últimos años es el proceso de reducción que ha sufrido su gama de producto. El número de modelos comercializados por ambas compañías ha ido de más a menos hasta llegar a un punto muy delicado que, básicamente, pone en serio riesgo su continuidad a largo plazo. Más aún si tenemos en cuenta la «limitación» geográfica que tienen debido a que han ido plegando velas en numerosos mercados.

En estos momentos, si nos adentramos en el configurador estadounidense de estas dos marcas, nos encontraremos con que Dodge Journey correrá el mismo destino. Es más, ya está siendo retirado de algunas de los estados del mencionado país norteamericano. En definitiva, son dos modelos que están de salida así que podemos decir que la gama Dodge se compone realmente de tres modelos: Charger, Challenger y Durango.

A pesar de esta situación interna que está viviendo Dodge, sigue desempeñando un papel protagonista dentro de FCA. Es más, sus ventas representaron el 11% del total de registros globales de FCA durante el pasado año 2019. Lamentablemente, esta situación a corto plazo cambiará a peor. Y es que, la marcha del Grand Caravan y del Journey no es algo menor, más aún si tenemos en cuenta su volumen de ventas tanto en Estados Unidos como en Canadá.

Las cosas en Chrysler no son distintas. Desde el año 2017 la popular marca estadounidense ha estado pidiendo a gritos nuevos modelos. Su gama se compone actualmente por dos vehículos: Pacifica y 300. Si bien en su configurador podemos encontrar la denominación Voyager lo cierto es que simplemente se rescató del olvido dicho nombre para usarlo en una versión del Pacifica.

El Chrysler 300 pide a gritos una renovación integral o un modelo que ocupe su puesto. Y aunque el Pacifica había venido reportando unas ventas notorias, lo cierto es que la renovación de sus principales rivales ha complicado las cosas en un segmento donde la competencia es voraz.

En los últimos años se ha especulado en varias ocasiones con la posibilidad de que Chrysler aumente su gama con nuevos modelos. Sin embargo, estas informaciones no han llegado a materializarse. Sin lugar a dudas la esperanza está en que, una vez FCA tenga acceso a la tecnología de PSA, pueda usar sus plataformas y mecánicas para desarrollar nuevos modelos de índole generalista para, por ejemplo, marcas como Chrysler.

Tener una gama escueta no es sinónimo de problemas

Que una marca de coches tenga una gama escueta o muy reducida no es a priori un grave problema. El ejemplo más claro al respecto es Lancia, otra de las firmas de FCA. Recordemos que Lancia solo está disponible en un único mercado, Italia, y que su gama se compone de un solo modelo, el Lancia Ypsilon. ¿Y ha sido esto un impedimento para el crecimiento de la marca? Ni mucho menos. Sus cifras de ventas son todo un éxito e incluso supera a otras compañías con una mayor oferta de producto y que están presentes en más de un mercado.

Ahora bien, lo que no se debe descartar es que dicha estrategia de oferta tan reducida sí acabe derivando en una complicada situación si la marca no es capaz de gestionar bien la evolución de sus productos para mantener el volumen de ventas y, en definitiva, el crecimiento.

Fuente: Fiat Group World