El Dodge Demon Hennessey HPE1000 exprimiendo sus 1.070 CV en circuito

Dodge Challenger Demon Hennessey HPE1000.

Aunque no cuenta con la potencia anunciada inicialmente por John Hennessey, que nada más presentarse el modelo aseguró que su versión del Dodge Challenger Demon contaría con 1.500 caballos, el Dodge Demon Hennessey HPE1000 no deja de ser toda una bestia, más radical aún que el Demon en su configuración original de fábrica.

Este proyecto de Hennessey hemos podido seguirlo desde muy cerca como ningún otro, ya que desde los primeros momentos, el tuner tejano ha ido ofreciendo información de su desarrollo. Incluso se publicaron varios vídeos de los tests previos que se realizaron al primer ejemplar del modelo que llegó a sus instalaciones en Sealy, Texas. Poco después, fueron revelados todos los datos y las primeras imágenes del modelo una vez concluída su transformación, además de algunos vídeos del modelo en el banco de potencia.

Empleando la habitual denominación HPE1000 y no sin razón, Hennessey ha logrado extraer del V8 HEMI sobrealimentado de Dodge nada menos que 1.070 CV (1.056 hp) y 1.311 Nm de par máximo, lo que suponen más de 200 caballos por encima de la configuración básica original del modelo: 819 CV (808 hp) empleando combustible convencional. Las prestaciones del nuevo Demon HPE1000 mejoran las del Demon, completa el cuarto de milla en 9.38 segundos y el 0-60 mph (0-96 km/h) lo realiza en 1.93 segundos.

Más de 1.000 caballos para el Demon.

Con la publicación de este nuevo vídeo, Hennessey nos ofrece una nueva perspectiva del modelo, pues ahora podemos verlo en acción y además sin restricciones de ningún tipo más allá de las propias del trazado donde ha sido grabado el metraje.

El circuito empleado es precisamente la pista de pruebas de Hennessey Performance, que está situada en sus propias instalaciones y que no es más que un par de rectas paralelas muy largas unidas por sus extremos. Cómo podemos ver en el vídeo, en el mismo instante que el vehículo encara las rectas el piloto da gas a fondo, desatando toda la caballería disponible y el abrumador sonido del V8 sobrealimentado.

Lo cierto es que el vídeo en si no resulta demasiado espectacular, a menos que atendamos las constantes explicaciones del piloto (en inglés) pues la mayoría del metraje transcurre dentro del habitáculo. Pero en los planos exteriores, sobre todo aquellos en los que el vehículo enfila las rectas, la naturaleza de su sonido sorprende y no por su elevado volumen, que lo tiene, sino porque cuenta con un sonido muy especial.