El Nissan Leaf es muy dependiente de las bonificaciones fiscales en EEUU
Uno de los motivos para adquirir un coche eléctrico como el Nissan Leaf es la ecología, pero más importantes son los motivos de índole económica. Estados Unidos es un ejemplo perfecto de ello, sus ventas están cayendo y vamos a ver porqué
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Publicado: 08/06/2015 19:00
Uno de los principales mercados para el eléctrico japonés, el Nissan Leaf, es Estados Unidos, además de Japón. Una de las tres fábricas que lo producen se encuentra en dicho país, debido a que la demanda lo justifica. Recordemos que el Nissan Leaf es el coche eléctrico más vendido del mundo, hoy día, e históricamente.
En dicho país existe una bonificación fiscal (tax credit), a nivel nacional, por la compra de un eléctrico para aquellos ciudadanos que reúnan las condiciones, de 7.500 dólares. Además, en algunos estados existe una bonificación de otros 5.000 dólares. La suma de ambas ayudas permitía tener el Leaf por muy poco dinero, desde 50 dólares al mes en régimen de leasing.
Con semejante panorama, muchos clientes han sido seducidos y adquirieron el eléctrico para sus desplazamientos urbanos y periurbanos. Pero las ventas se están reduciendo un 26% en lo que va de año principalmente por el bajo precio de la gasolina, menos de 3 dólares por galón.
En mayo se vendieron 2.104 Leaf, un 33% menos que el mismo mes del año pasado
El consumidor norteamericano puede cambiar rápidamente sus gustos a la hora de comprar coche dependiendo de la gasolina. Cuando los precios superaban los 4 dólares por galón, se buscaban más coches eficientes con motores de cuatro cilindros, menos SUV y menos pick-up. Ahora están volviendo a las andadas.
Para el Nissan Leaf, esto es determinante, porque no todos los clientes miran por el ahorro a largo plazo que puede suponer. Quien adquiere el coche en leasing tiene preocupaciones más a corto plazo, y evidentemente quiere que le salga rentable. El coche eléctrico no es tan competitivo cuando la gasolina está barata, y los beneficios a largo plazo no importan tanto.
Además de esta amenaza, hay otra nada desdeñable, la reducción de ventas que está por llegar según se vayan finalizando las bonificaciones a nivel de cada estado. En coches de precio un poco elevado, como es el caso del Leaf, el consumidor se fija mucho en las subvenciones. No tenemos más que mirar a Noruega, donde pasa lo mismo, e ídem en Japón.
Nissan tiene que seguir trabajando en mejorar la deseabilidad de su eléctrico. Ya hubo avances significativos con el abaratamiento de las versiones de acceso, con un menor equipamiento, y el aumento de autonomía y capacidad de maletero a mitad de ciclo de vida. Una mayor autonomía le ayudará, evidentemente, pero no es un factor tan decisivo.
Los problemas tradicionales que suele tener el coche eléctrico son el precio (más alto de lo normal) y la autonomía (más baja de lo normal). Estos problemas se relativizan con una buena infraestructura de recarga, y a ser posible, que esta sea gratuita o ventajosa para el conductor. Por eso, en el Estado de Denver, Nissan ofrece dos años de recarga rápida gratuita desde este mes.
No está precisamente ganada la batalla del coche eléctrico, sigue dependiendo mucho de la política fiscal de cada lugar, y no menos importante, del precio de la gasolina. Los responsables de Nissan no se atreven a dar cifras de hasta dónde pueden caer las ventas en los próximos meses.
Fuente: Automotive News