El Plan VEA se retrasa al último trimestre de 2018

La última vez que el Gobierno de España aprobó un paquete de ayudas a la movilidad alternativa, estas murieron de éxito. Se llamaba Plan MOVEA y aportaba hasta 5.500 euros en el caso de la compra de un eléctrico. Las solicitudes agotaron el presupuesto en 24 horas, y puede volver a ocurrir al ritmo al que van las cosas.

Fuentes del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo han revelado a Europa Press que el plan de ayudas VEA estará disponible en el último trimestre. Tendrá dos ramas, VEA Vehículos y VEA Infraestructuras, para que el despliegue de los vehículos vaya parejo a mejoras en la Infraestructura de recarga o repostaje.

De acuerdo a estas fuentes, el retraso sobre el plazo previsto (julio) se ha debido a la tardía aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) por la moción de censura al PP, y por el bajo grado de ejecución presupuestaria en la industria. El parón veraniego ha hecho lo demás.

El Toyota C-HR lidera sin ambages la movilidad alternativa en España, no precisa ayudas para venderse bien

Begoña Cristeto, Secretaria General de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa, informó en mayo que la dotación del Plan VEA sería de 16,6 millones de euros, por lo que el número de beneficiarios seguirá siendo pequeño y el presupuesto puede quedar agotado en poco tiempo.

Los beneficiarios del VEA serán los modelos electrificados (híbridos, híbridos enchufables y eléctricos) así como los impulsados por gas (GLP, GNC o GNV). A decir verdad, salvo los eléctricos, son motorizaciones que están despegando solas sin necesidad de ayuda. El impulso en esas ventas viene dado por el cerco mediático sobre el motor diésel.

Todos los modelos susceptibles de recibir ayudas serían ECO o CERO a efectos de distintivos ambientales

Como casi la mitad de las matriculaciones españolas se practican en Madrid y Cataluña, lo que suceda en las capitales de ambas autonomías resulta clave para el consumidor. Los consistorios de las capitales abogan por una movilidad alternativa y más racional, donde el gasóleo tiene cada vez un espacio menor. Las ventas de los diésel han retrocedido con mucha fuerza ante el temor de que les afecten restricciones de circulación.

Producción de vehículos de energías alternativas en España (2015)

Las fuentes citadas no descartan que pueda haber una nueva edición del Plan PIVE, que fue la herramienta del Gobierno anterior -del PP- para evitar el hundimiento de las matriculaciones en particulares después del subidón del IVA al 21 % ordenado por Bruselas. En la práctica fue una rebaja de los impuestos a los coches.

El PIVE cumplió su función y el mercado se fue recuperando

Ahora mismo el PIVE no es necesario en el lado de la demanda, sino en el de la oferta, mirando la parte de los fabricantes, acelerando los procesos de digitalización y transición ecológica. En España es todavía minoritaria la producción de modelos alternativos, al menos en relación al número de gasolina y diésel que se fabrican, en su mayoría para mercados exteriores.

Además, coyunturalmente vamos a ver un verano caliente en ventas, el efecto del cambio de NEDC a WLTP trae consigo un aumento de los impuestos a muchos modelos a partir del 1 de septiembre por los valores correlados y una reducción del número de versiones disponibles de nueva homologación.

Los vehículos eléctricos crecen en ventas, pero parten de volúmenes muy bajos, y están fuertemente condicionados a las ayudas por su mayor precio inicial

Hasta el 31 de diciembre, si no hay prórroga, los concesionarios tienen que librarse de muchos stocks con homologación NEDC. Ayer vimos que el Gobierno también estudia si conceder una moratoria para que los concesionarios puedan vender los modelos de homologación NEDC durante más tiempo, con un límite del 10% de las ventas del año 2017.

Los concesionarios tendrán que automatricular en diciembre todo lo que no hayan podido vender

Por otra parte, fuentes del sector automovilístico consideran que nos acercamos a los 1,3-1,4 millones de unidades que mostrarían que el mercado español ya está "sano", pero se teme un efecto frenazo a partir de septiembre, cuando incrementen los impuestos a los modelos que cambien de tramo en el impuesto de matriculación.

Se va a dar la paradoja de que el VEA podría beneficiar mucho a los híbridos, que ya se venden bien "solos", y poco a los de GLP, ya que varias marcas han descatalogado modelos por las homologaciones a WLTP, priorizadas sobre los modelos de mayor venta. Al menos se beneficiarán muchos eléctricos, cuyas ventas seguramente queden frenadas a la espera de que se concreten los plazos y requisitos para beneficiarse del VEA.