El Subaru Impreza recibe mejoras estéticas y técnicas

Al llegar a la mitad de su ciclo comercial el Subaru Impreza norteamericano recibe un restyling, tanto en su carrocería hatchback de cinco puertas como en la berlina. Las novedades se presentan en forma de cambios estéticos, de acabados del interior así como mejoras a nivel dinámico y de seguridad. Estos cambios podrían llegar al Subaru XV.

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Publicado: 28/09/2014 14:00

Pese a que en Europa el nombre Impreza es algo prácticamente extinto, en algunos mercados sigue comercializándose el que probablemente sea uno de los nombres más reputados de la marca. Estados Unidos es el principal mercado para Subaru, y allí se comercializan los Impreza sedán y hatchback que reciben multitud de cambios.

El Subaru Impreza se moderniza con algunos cambios en su envoltorio. Recibe un restyling tras algunos años en el mercado, modificando su frontal con nueva parrilla, paragolpes y diseño de los faros. Los retrovisores reciben un nuevo diseño mientras que la carrocería sedán incorpora un pequeño spoiler en la tapa del maletero. Para más personalización, se ofrecen nuevas llantas de aleación de 16" y el color blanco perlado.

El interior mejora su sensación de calidad con mayor número de elementos en negro piano y aluminio además de un nuevo sistema de navegación, mucho más integrado que los que se ofrecían hasta ahora, que estaban encastrados en un hueco 2DIN. Las tapicerías de cuero lucen ahora pespuntes plateados y el selector del cambio automático recibe un nuevo diseño, más moderno. Los acabados más altos ahora lucen un display LCD de 3,5" a color en el cuadro de relojes.

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Pero los cambios no quedan solo en el plano estético y Subaru ha apostado por hacer un coche más cómodo y refinado. Se mejora el aislamiento y se pone a punto la suspensión, a la vez que se dota a la dirección de una menor desmultiplicación.

A nivel mecánico cabe destacar el cambio en la gestión del cambio CVT Lineartronic, que ahora funciona a semejanza de un cambio automático tradicional, simulando las marchas en fuertes aceleraciones. En Europa este cambio fue introducido con la llegada de la caja automática al Outback diésel.

En cuanto a seguridad la mejora es notable con la incorporación de la segunda generación del Subaru EyeSight, que incorpora funciones como la frenada automática, el control de crucero adaptativo o el avisador de cambio involuntario de carril. Ahora también se montan antinieblas cornering para mejorar la iluminación en curvas por la noche y una cámara de estacionamiento con mayor ángulo de visión.

El Subaru Impreza se ofrece únicamente con el motor 2.0 bóxer gasolina de cuatro cilindros y 148CV. Según la terminación escogida el cambio puede ser manual de cinco relaciones o CVT Lineartronic, aunque la tracción permanente AWD de Subaru es de serie.

Aún sin confirmación por parte de la marca, es de esperar que estos cambios también lleguen al Subaru XV, por lo que podríamos experimentar algunas de estas mejoras en las unidades europeas del XV, cuyo restyling no debería demorarse en exceso.

Fuente: Subaru

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