El enorme enfado de René Rast con un DTM con estándares «inaceptables»

René Rast iniciaba la segunda mitad de la temporada del DTM espoleado por los resultados obtenidos antes del parón veraniego. Sin embargo, el piloto de Audi no tuvo el ritmo deseado en Nürburgring, algo que podría incluso haber solventado de no haberse visto implicado en un buen número de contactos. El futuro piloto de BMW y de McLaren ha terminado realmente enfadado el fin de semana, asegurando que los estándares de conducción que parece tener el DTM hacen que la serie esté perdiendo gran parte de su brillantez y diversión.

De hecho, Rast ha salido de Nürburgring con dos puntos en su casillero, fruto de dos carreras plagadas de incidentes y toques. Entre los pilotos que golpearon al Audi del alemán estuvo un Laurens Vanthoor que provocó que Rast realizase un trompo. En la segunda manga, el tres veces campeón del DTM tuvo que retirarse tras ser empujado por David Schumacher a la grava en la última curva del circuito. Tras arrancar el fin de semana a 10 puntos de líder, Rast está ahora a 29 unidades del primer clasificado.

Visiblemente enfadado, René Rast aseguró tras su abandono en la segunda carrera al micro de la organización: «Schumacher me golpéo por primera vez en la chicane, así que salí mal de la curva. Luego nuevamente trató de pasar y me golpeó nuevamente en la parte trasera y me hizo trompear en la grava. Es inaceptable. Los estándares de conducción este año del DTM son totalmente inaceptables. Algunos pilotos conducen como niños pequeños. No tienen experiencia y ya no es divertido conducir».

El piloto alemán incidía en esta idea: «Creo que algunos pilotos tienen que volver a las series de apoyo, obtener algo de experiencia y luego ya volver al DTM. Lo que está claro es que, con este tipo de pilotos y maniobras, así ya no es divertido correr aquí. Espero que al menos haya sanción para David Schumacher, pero no sólo para él, sino también para otros muchos pilotos. Ya no puedes correr, tan solo es una apuesta. Algunos dejan espacio, pero otros no. Te empujan al césped, te golpean, te hacen trompear. Es una ruleta rusa».

A modo de conclusión, Rast ha añadido: «Fui golpeado básicamente por todos los lados, creo que ha sido uno de los fines de semana de mi vida con más contactos. Los estándares de conducción, como en Norisring, son bastante malos. Allí ya vimos que la gente pilota como si fueran autos de choque. Es un poco vergonzoso porque tratamos de no meternos en problemas, pero muchas veces se trata de tener suerte y que no te saquen de la carrera».

Fotos: DTM