Este potente escáner es el objeto de deseo de las marcas para reforzar la calidad de producción

La calidad de producción se ha convertido en una de las máximas de todos los fabricantes de coches nuevos. Las marcas invierten miles de millones para mejorar los procesos de fabricación y así evitar que las unidades salgan de las líneas de montaje con fallos que, en una gran mayoría, llegan a las manos de los clientes.

A pesar de que se realizan verificaciones en la pintura de la carrocería y también antes de enviar al transporte, comprobando el funcionamiento de los sistemas, del motor sobre un banco de rodillos y unas pruebas de aislamiento acústico, térmico y de estanqueidad, es casi imposible evitar que algún fallo de producción se cuele. Esto lo evita el potente escáner de una certificadora de calidad con reconocimiento mundial. Los de TÜV Rheinland son los propietarios de una de las herramientas más potentes que existen en la industria, el escáner Adomea.

Así funciona el nuevo escáner de calidad Adomea, una herramienta que quieren las marcas de coches

El escáner abarca múltiples campos de detección de daños

Se trata de un túnel especial en el que una veintena de cámaras de alta resolución son capaces de analizar un modelo en solo 45 segundos, detectando con suma precisión todos los daños que pueda presentar por debajo de la carrocería. Los expertos de esta certificadora alemana utilizan la avanzada tecnología de inteligencia artificial para la detección e interpretación de los datos recogidos, tras contar con una biblioteca con más de 150.000 patrones de daños.

Los responsables de la empresa apuntan que el sistema es programable, por lo que los interesados pueden contar con una potente herramienta para detectar daños internos, el tipo, tamaño y hasta su nivel de gravedad. Un sistema tan potente que puede utilizarse no solo para detectar fallos en el estampado de la carrocería, sino también para la nueva hornada de coches eléctricos. Por ejemplo, para averiguar si existe una celda en mal estado en el interior de una batería ya montada a bordo del vehículo.

La herramienta definitiva para detectar fallos en las baterías de los eléctricos

Los principales fabricantes europeos ya han podido comprobar las enormes ventajas que supone contar con este potente escáner, convertido ya en un verdadero objeto de deseo. Pero ha ganado mucho más interés cuando los desarrolladores han anunciado un nuevo componente que permitirá analizar y rastrear la parte inferior de los coches, el suelo donde se ubica la batería, un área que es más propenso a daños, y que puede también delatar fácilmente si la caja de la batería contiene fisuras.