Eslovaquia permitirá la conducción de coches autónomos ¡sobre las aceras!
Los diferentes países europeos avanzan en el desarrollo de sus leyes de conducción autónoma. Eslovaquia ha sido el último país en anunciar la regulación de esta importante tecnología en su territorio, un borrador que difiere enormemente de otros países. Entre las sorpresas, los coches autónomos podrán rodar por la acera.
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Publicado: 13/10/2022 20:00
La Unión Europea ya ha legalizado la conducción autónoma en el Viejo Continente, aunque ahora son los países miembros los que tienen que desarrollar la normativa. Alemania ya ha sido la primera en contar con una regulación específica, Francia ya tiene un borrador y Reino Unido también trabaja en una norma que pretende unos objetivos difíciles de conseguir. El último país que se ha sumado ha sido Eslovaquia.
Y como cabía esperar, su borrador presenta interesantes detalles que a más de uno sorprenderán. De hecho, apuntan que será «una de las ganadoras», con un enfoque más permisivo para los coches autónomos. El Ministerio de Transporte de la República Eslovaca cuenta con el proyecto de ley preparado, pero antes de someterse a su votación se han realizado una serie de enmiendas que deberán ser discutidas en el Parlamento antes de la aprobación, relacionadas con los vehículos y los de reparto, entrando en escena un componente muy espinoso, el del término «conductor», según explican desde «Autoviny».
Los coches autónomos serán legales en Eslovaquia en 2023
La futura normativa eslovaca, que puede entrar en vigor a partir del próximo 1 de diciembre, contempla que los coches autónomos puedan conducir sobre las aceras, aunque no serán los turismos convencionales. La normativa apunta directamente a los vehículos automatizados de reparto, comportándose como los peatones y a una velocidad máxima de 6 km/h. Una velocidad que podrá alcanzar los 20 km/h en viales compartidos con bicicletas y hasta 45 km/h en carreteras.
Los legisladores eslovacos también han dado un nuevo significado al concepto de conductor. Un término que, en las normativas de conducción autónoma, es más que espinoso, pues no terminan de ponerse de acuerdo en el papel de esta figura al volante. Lo cierto es que para los eslovacos, el conductor es «la persona que conduce un vehículo o la persona que supervisa un vehículo que utiliza un sistema de dirección automática para la conducción».
Una nueva definición que amplía el papel del conductor. El nuevo texto no hace referencia expresa a la responsabilidad del conductor ante un accidente ocasionado por un coche autónomo, a pesar de que la normativa añade la coletilla específica de que es el que supervisa el funcionamiento del sistema. Cabe recordar que algunos fabricantes ya han anunciado que asumirán su responsabilidad ante un mal funcionamiento del sistema que cause un accidente. Además, países como Reino Unido también han incluido una cláusula que responsabilizará directamente a las marcas, protegiendo al conductor.