Las radiografias de los deportivos más espectaculares e icónicos
Os traemos una especial selección de los mejores planos de detalle y radiografías de los superdeportivos más espectaculares y los modelos más icónicos de la historia de la automoción. Un documento indispensable para cualquier amante del automovilismo o la ingeniería.
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Publicado: 03/06/2016 12:00
Hoy ya casi en desuso, las ilustraciones de automóviles de tipo radiografía o en vista de rayos X eran tremendamente habituales hasta hace no tantos años en esta industria. La llegada de nuevas tecnologías aplicadas al mundo de la fotografía, el vídeo y el diseño gráfico en general las han relegado en parte, dando paso a otras disciplinas gráficas más demandadas, sobre todo las interactivas.
Sin embargo, la espectacularidad de este tipo de ilustraciones sigue conservando toda su fuerza, sobre todo cuando estos trabajos nos muestran aquellos modelos que ya sea por pertenecer al segmento de superdeportivos o bien por ser protagonistas de la historia del motor, como es el caso de la especial galería que os hemos preparado para este reportaje.
Aunque aun podemos encontrar este tipo de trabajos procedente desde los departamentos de marketing de las distintas marcas, lamentablemente ya no es tan habitual, sobre todo porque en muchas ocasiones este tipo de obras debían realizarlas auténticos especialistas del arte del dibujo, y la llegada de las herramientas informáticas de diseño han democratizado esta serie de labores.
Entre la selección que os hemos recopilado de este tipo de dibujos podemos encontrar una gran selección de auténticos iconos del mundo del motor, tanto dentro de los distintos modelos de producción como incluso clásicos del universo de la competición.
Especialmente reseñable son aquellas obras que nos muestran aspectos generalmente poco vistos de estos auténticos monstruos sobre ruedas, como es el caso del Cobra, en el que se puede apreciar la ligereza visual de su bastidor tubular. O la espectacularidad intrínseca a la radical tecnología de modelos como el HondaNSX de primera generación, el Lamborghini Countach o la versión de competición del Ferrari 550 Maranello.
Precisamente los modelos de motor central son aquellos que resultan más espectaculares, ya que al tener la oportunidad de poder asomarnos al interior de sus bastidores podemos apreciar las verdaderas proporciones de sus mecánicas de alta cilindrada con respecto al resto de su carrocería, como puede ser el caso del Maserati Bora y su V8 de 4.7 litros, del que echamos de menos en su plano de detalle su característico y complejo sistema hidráulico, heredado de Citroën y que operaba elementos como el reglaje de los asientos o la elevación de los faros retráctiles.
En otros casos, podemos apreciar las diferencias internas de algunos modelos que compartían plataforma pero con planteamientos tan distintos como el Ferrari 328 GTS o el Ferrari Mondial 3.2, modelos que compartían motor y bastidor pero que en el caso del Mondial disponía de un habitáculo 2+2 en lugar de biplaza, además de disponer de un práctico maletero trasero tras el V8 transversal.