Especial Skyfall. Los coches de James Bond (VI): Aston Martin Vanquish 2002
La primera película de James Bond en pleno siglo XXI tenía una nueva sorpresa sobre ruedas reservada para los fans más puristas de la saga. El agente secreto volvía a sus orígenes británicos sobre automóviles y, como no podía ser de otra forma, lo hizo a los mandos de último Aston Martin, el Vanquish.
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Publicado: 02/11/2012 19:00
Mientras Aston Martin sobrevivía a la década de los años 90 con modelos que no terminaban de encajar en el mercado como los ostentosos Virage y con un DB7 que se vendió muy bien (más de 7.000 unidades entre 1994 y 2003) pero que vivió muy a la sombra de algunos de sus rivales, James Bond combatía contra el mal subido en unos cuantos BMW.
Pero para el estreno de “Muere otro día” (2002), el MI6 ya tenía preparado un nuevo Aston Martin para 007. Pierce Brosnan estrenaría un Vanquish en su última película encarnando al agente secreto y también volvió a sufrir el mismo problema que otros actores habían tenido anteriormente al final de sus propias sagas: una cierta exageración que restaba demasiado realismo al personaje, y este Aston Martin del siglo XXI tuvo buena culpa de ello.
Tres fueron las unidades que se fabricaron para el rodaje, a las que se les tuvo que sustituir el motor y la transmisión para poder alojar el arsenal que no podía faltar en un auténtico coche de James Bond: lanzacohetes tras la parrilla y ametralladoras sobre el capó o ruedas con clavos con las que el Vanquish no se dejó cazar por un Jaguar XKR verde sobre el hielo.
En cuanto al Aston Martin Vanquish, salió de los lápices del genial Ian Callum, se vieron los primeros prototipos en 1998, fue presentado en Ginebra en 2001 y finalmente puesto en la calle en ese mismo año. Fue el modelo tope de la gama hasta el fin de su producción, mientras la marca sufría una revolución por debajo entorno al espectacular éxito del DB9.
Siempre fiel al motor V12 6.0, nació con 450 CV y terminó su andadura con los 528 de la versión S. Según Aston Martin, las mediciones oficiales del coche de Bond le permitían acelerar de 0-100 km/h en 4,7 segundos y 306 km/h de velocidad punta. Entre sus grandes atributos estuvo un liviano chasis de aluminio extruido, fibra de carbono y acero estampado y se podía comprar tanto en configuración biplaza como 2+2.
El pasado verano, Aston Martin anunció que el Vanquish volvía a la producción, con un nuevo diseño y 573 CV de potencia.
James Bond había vuelto a casa, o más bien, los Aston Martin habían vuelto al garaje de 007 y sus siguientes aventuras, el agente secreto volvería a elegir su montura en el catálogo de la marca de Gaydon, aunque esto te lo explicaré en el próximo capítulo de la saga de los coches de James Bond en MOTOR.ES.
Fuente: Aston Martin