Cómo afecta la temperatura y la carga a la autonomía de las furgonetas eléctricas
Las furgonetas eléctricas empiezan a imponerse en el mercado de los vehículos comerciales. Una solución que, si bien no permite grandes alardes de prestaciones, sí que ofrece una autonomía suficiente para trayectos urbanos e interurbanos. Ahora, un estudio ha revelado cómo influyen las temperaturas y la carga en la autonomía.
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Publicado: 26/11/2021 20:00
Las temperaturas negativas afectan seriamente a las baterías de los coches eléctricos, disminuyendo la autonomía. Esta es una de las claves a las que se enfrentan algunos clientes a la hora de comprar una furgoneta eléctrica, especialmente aquellos que viven o trabajan en regiones más frías, ya que el esfuerzo extra de calentar el habitáculo requiere una dosis de energía que, irremediablemente, se pierde a costa de la energía almacenada en la batería.
Este es el motivo por el que disponen de sistemas de gestión de la temperatura para que la batería no acuse el frío y mantengan una temperatura de funcionamiento óptima, en el entorno de los 20º. Unas circunstancias que también afectan a las furgonetas eléctricas que, cada vez, son más en el sector de los comerciales. En general, todos los eléctricos sometidos a termómetros de hasta -15º C pueden ver mermada su autonomía hasta un 54%. Pero en los vehículos comerciales también juega en contra la carga. Dos factores que se han analizado a fondo en unas pruebas para determinar la autonomía real y aproximada de este tipo de modelos.
La temperatura incide más negativamente que la carga en las furgonetas eléctricas
Expertos de la consultora Arval han puesto se han trasladado al complejo de pruebas de Millbrook, en Reino Unido, para analizar los efectos sobre tres furgonetas eléctricas, representantes de cada uno de los segmentos de los comerciales ligeros y con los diferentes niveles de masa máxima autorizada: de hasta 2,4 t, de tamaño medio con entre 2,4 y 3,0 t y una grande con más de 3,0 t, y considerando los mismos requisitos que exige la Unión Europea en las pruebas del ciclo WLTP y RDE de conducción en condiciones reales con un solo conductor.
La consultora no ha señalado la temperatura real de las pruebas, más que apuntando que el estudio se realizó con temperaturas más bajas de las habituales en España. A pesar de este detalle, los termómetros afectaron seriamente tanto a la autonomía como a la regeneración de energía, por lo que en condiciones invernales, la autonomía máxima se rebaja hasta el 70% de la homologada por el fabricante, alcanzando el 80% si los trayectos excluyen la circulación en autopista.
Esto significa que modelos como la nueva Kangoo E-Tech, con 300 kilómetros de autonomía homologados, dispondrá de entre 210 y 240 kilómetros reales, mientras que uno como el Peugeot e-Expert con hasta 330 kilómetros homologados, rendirá entre 264 kilómetros. Y una furgoneta de la talla del Opel Movano-e, con un máximo de 224 kilómetros, ofrecerá de 179 kilómetros. Valores considerando un uso urbano e interurbano, sin autopista. El análisis también ha revelado que el efecto de la carga sobre la autonomía ha sido prácticamente mínimo, variando entre un 8 y un 11%.
Fuente: Arval