Europa podrá acabar con su dependencia de China en la producción de baterías en 2027, pero tiene que moverse ya
El dominio de China en el mercado de los coches eléctricos y las baterías es absoluto, pero tanto Estados Unidos como la Unión Europea se están moviendo para acabar con él. ¿Podrá el Viejo Continente lograrlo?
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Publicado: 25/01/2023 11:30
En los últimos meses, hemos hablado en varias ocasiones de la situación actual que vive el mercado automotriz y también el de las baterías, que a raíz del auge de los coches eléctricos se ha convertido en un condicionador muy relevante para la industria.
Actualmente, China domina la producción de baterías de manera casi exclusiva, basando su poderío en la enorme capacidad de refinado y procesamiento de las materias primas.
Eso le permite, a su vez, acaparar la producción y la fortaleza de su economía no hace sino reforzar una posición que, a consecuencia de las inversiones programadas, no parece que vaya a cambiar. ¿O sí?
Informes contradictorios
Si bien informes como los dos de Benchmark a los que hemos hecho referencia son bastante pesimistas, el recientemente publicado de Transport & Environment abre la puerta a la esperanza, aunque con matices. Pero antes, pongamos toda esta información en contexto.
«Europa no puede competir con Estados Unidos o China sin un fuerte brazo financiero de la UE que respalde su ambición industrial y climática»
Benchmark Mineral Intelligence es una empresa especializada en el análisis y la consultoría de los mercados de metales y minerales críticos, así como las baterías. También ofrece servicios de investigación y consultoría personalizados para ayudar a las empresas a tomar decisiones informadas en el mercado de metales y minerales críticos.
Por su parte, Transport & Environment es una organización no gubernamental europea que se dedica a mejorar la sostenibilidad del transporte. Su objetivo es promover políticas y tecnologías que reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero, la contaminación del aire y el ruido, y mejoren la seguridad vial y la movilidad sostenible.
Europa tiene la llave de su propio destino
Al menos eso es lo que afirma el mencionado informe de T&E, que llega a la conclusión de que la Unión Europea cuenta con potencial para convertirse en un territorio independiente de China a medio plazo, pero para ello debe ponerse a trabajar con rapidez.
En concreto, el informe señala que con un sistema más sostenible y ambicioso, Europa sería capaz de producir suficientes baterías para satisfacer el 100 % de su demanda interna ya en 2027.
E&T va incluso más allá, pues afirma que la Unión Europea es capaz de abastecerse de litio refinado en 2030. Pero, ¿qué tiene que ocurrir para que dicha predicción se cumpla?
El informe establece cinco puntos clave, señalando que si bien los requisitos absolutos de contenido local pueden ser difíciles, existe un potencial significativo en la cadena de suministro de vehículos eléctricos, baterías y metales críticos. Un potencial que Europa puede y debe aprovechar a través de una política industrial sólida.
1. El mercado automotriz
El informe destaca en primer lugar que Europa va camino de producir 6,7 millones de coches eléctricos de batería (BEV) para 2030, lo que se alinea con el objetivo de reducir las emisiones de dióxido de carbono en un -55 % para 2030. Esto demuestra que los fabricantes de automóviles siguen las normas climáticas y planifican las inversiones nacionales en consecuencia.
Con ello en mente, el informe recomienda acelerar los objetivos previos a 2030, en particular estableciendo un mandato de flotas de la UE para el registro de BEV corporativos para 2026/7. Ello provocaría que el mercado de automóviles eléctricos de batería fuera mucho más grande en 2027, creando un mejor escenario comercial para la cadena de valor de la batería.
2. La producción de baterías
La mitad de las celdas de batería de iones de litio utilizadas en vehículos eléctricos y sistemas de almacenamiento de energía en la UE ya se fabricaron en el bloque en 2022, especialmente en Polonia, Hungría y, en menor medida, en Alemania y Suecia.
El análisis de T&E sobre la capacidad de celdas de batería hasta la fecha muestra que Europa puede ser autosuficiente en celdas de batería, es decir, producir el 100 % de su demanda de celdas de batería de iones de litio a partir de 2027.
3. El liderazgo sobre Estados Unidos
Mirando más a fondo los componentes de la batería, dos tercios de todo el material activo del cátodo (la parte más valiosa de la batería que contiene metales como el cobalto y el níquel) ya se puede producir en Europa para 2027, situándose los proyectos más grandes en Alemania, Polonia y Suecia, recalca T&E.
Aquí es donde Europa actualmente supera a los Estados Unidos en lo que respecta a cartera de proyectos, afirma el informe. Pero el país norteamericano ha iniciado un ambicioso proyecto de potenciación de la industria a través de la Ley de Reducción de la Inflación (IRA), que cuenta con nada menos que 369.000 millones de presupuesto para subsidios.
4. El refinado de las materias primas
Europa también está realizando inversiones en el refinado y procesamiento de metales para baterías, donde China domina hoy. El análisis de T&E del potencial para refinar litio muestra que más del 50 % de la demanda de litio refinado de Europa puede provenir de proyectos europeos para 2030.
El litio para alimentarlos puede provenir de minas globales, proyectos europeos siempre que cumplan con altos estándares (respaldados por la ley CRM, por ejemplo) y, de manera crucial en el futuro, de flujos de reciclaje de baterías.
5. El reciclaje
También existe un importante potencial de reciclaje: los materiales disponibles para el reciclaje de baterías al final de su vida útil o chatarra (de fábricas de baterías europeas) podrían satisfacer al menos el 8-12 % de las necesidades críticas de metales en 2030, asegura T&E.
Esto incluye una décima parte de todo el cobalto, 7 % de níquel y 6% de litio. Y, aunque los porcentajes no son elevados, pueden ayudar a las empresas europeas con escasez o precios altos en el mercado al contado (que se fijan en el margen).
Conclusiones
El Acuerdo Verde Europeo es una de las políticas climáticas más ambiciosas del mundo para llevar a la Unión Europea a la economía neta cero para 2050. Para que suceda, requerirá un aumento masivo de tecnologías, desde turbinas eólicas hasta baterías de automóviles eléctricos. Pero la pregunta es cuánto de todo ello provendrá de la industria en Europa.
Europa ya gasta mucho dinero en respaldar las ventas de vehículos eléctricos y las cadenas de suministro, incluida la fabricación de vehículos, la producción de baterías y el procesamiento previo. Pero sigue siendo insuficiente en comparación con el invertido por sus rivales.
«El problema no es solo la falta de dinero, sino la complejidad para conseguirlo», destaca T&E. «Los procesos de aprobación suelen ser lentos (con plazos desconocidos), burocráticos y no financiables de la misma forma que lo son los créditos de producción del IRA estadounidense».
Y pone como ejemplo las normas sobre ayudas estatales de la UE (bajo las que se rige la mayor parte de la financiación nacional), que piden a las empresas que demuestren que sus proyectos no habrían sido posibles sin dicha financiación.
Sin duda, es imprescindible racionalizar las normas sobre ayudas estatales, centrándose en las ayudas a la producción, los negocios de vehículos eléctricos, energías renovables y materias primas.
«Sin embargo, la simplificación de la ayuda estatal no es suficiente, ya que solo beneficiaría a estados miembros como Alemania», pero dejaría atrás a muchos otros países. Esto es contraproducente, porque es posible que los países ricos en efectivo no tengan el mejor potencial para el procesamiento de metales o las energías renovables, ya que esto depende de la geología, los recursos naturales y las ideas innovadoras.
De manera crucial, es necesaria la igualdad de condiciones para garantizar que Europa en su conjunto cumpla con sus ambiciones industriales y climáticas, no uno o dos de sus estados miembros.
«Es por eso que el Fondo Europeo de Soberanía (FSE) debe establecerse con carácter de urgencia y equiparse con una potencia financiera de al menos 350.000 millones de euros a través de la emisión conjunta de deuda de la Comisión Europea», solicita el informe.
«Europa no puede competir con Estados Unidos o China sin un fuerte brazo financiero de la UE que respalde su ambición industrial y climática», concluye.
Fuente: Forococheselectricos.com