Los fabricantes europeos reconocen estar lejos de China en la producción de coches eléctricos, y Reino Unido salva los muebles ampliando el acuerdo del Brexit
Reino Unido ha conseguido el apoyo que necesitaba de la Unión Europea para seguir colaborando con los fabricantes, y la producción de coches eléctricos. Un acuerdo in extremis que salva a las Islas de unos aranceles importantes a consecuencia del Brexit, reconociendo la UE que su posición en el mercado dista mucho de Estados Unidos y China.
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Publicado: 29/12/2023 14:00
Se ha hecho esperar pero Reino Unido ha logrado el apoyo necesario de los países europeos para continuar con el Acuerdo de Comercio y Cooperación que vencía el próximo 1 de enero de 2024. Sin él, y a consecuencia del Brexit, el Gobierno del Reino Unido no estaría en condiciones de poder fabricar coches eléctricos sin tener que pasar por la caja de la Unión Europea en la importación de bienes y materiales para la producción, lo que tendría unas consecuencias enormemente negativas para su economía.
Stellantis ya le avisó la pasada primavera de que si no lograba extender este acuerdo, saldría por la puerta rumbo a otras instalaciones con las que cuenta en el continente, lo que supondría abandonar la planta donde fabrica sus furgonetas eléctricas y dejar en la calle a miles de empleados. Unas circunstancias que tendrían un efecto rebote en los proveedores que también se verían abocados a marcharse o quedarse con el incremento en los costes de producción.
Reino Unido saca la cabeza para fabricar eléctricos sin aranceles
Pero, hace tan solo unos días que ambos gobiernos han logrado ampliar el tratado de comercio, lógico también si tenemos en cuenta que a los productores europeos les interesa tanto como a sus países de origen. Para que te hagas una idea de la magnitud, fuentes de ACEA, que han celebrado el acuerdo, han señalado que supondrá un ahorro de unos considerables 4.300 millones de euros en costes de aranceles. Una gran noticia, pero no tanto como el reconocimiento de lo que es un secreto a voces.
Sigrid de Vries, directora general de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles, ha recibido la noticia con satisfacción, pero también ha admitido algo que hasta ahora no habían hecho: reconocer que el continente está muy por detrás de otros líderes mundiales, señalando que «A diferencia de China y Estados Unidos, la UE carece de una estrategia industrial sólida para impulsar la fabricación de vehículos eléctricos», añadiendo que «Si bien aplaudimos la difícil decisión de hoy, debemos aprovechar esta colaboración positiva para resolver el inmenso desafío de construir una cadena de suministro de baterías para vehículos eléctricos madura en Europa».
Europa tiene que mirar a China y USA en la estrategia de eléctricos
De Vries ahora mira a la Unión Europea, apuntando que «Los fabricantes de vehículos quieren liderar la transición ecológica de Europa y construir el futuro de la fabricación de vehículos eléctricos en Europa, en beneficio de todos los europeos. Sobre la base de la decisión constructiva de hoy de los legisladores, la atención debería centrarse en formular una estrategia industrial holística de la UE para toda la cadena de valor verde, desde I+D, minería, refinación y fabricación hasta las redes de carga, suministro de energía, reciclaje e incentivos de compra», justamente lo que los países están retirando.