Los fabricantes no abandonan Reino Unido pese al "Brexit"

Operario trabajando en la fábrica de motores de Ford en Dagenham (Reino Unido)

Finalmente el Nissan Qashqai de tercera generación no se producirá en España, porque se producirá también en el Reino Unido. También se ha adjudicado a dicha planta el X-Trail, para no tener que traerlo desde Japón. El Note se deja de producir, el nuevo Micra se hará en Francia y el Leaf de momento sigue donde estaba. La planta británica de Sunderland también produce el Infiniti Q30 y QX30.

Esta adjudicación ha venido después de que Nissan amenazase -con mayor o menor sutileza- que se replantearía sus inversiones en el Reino Unido si se producía un "hard brexit". Esto significa una desconexión de Europa continental de modo que vuelvan los aranceles, por lo que la industria tendría que pagar a la UE el 10% de sus exportaciones en forma de barreras comerciales.

No se saben los detalles, pero el Gobierno del Reino Unido, encabezado por la primera ministra Theresa May, ha conseguido que Nissan se quede. Se especula que se compensarían los costes de importación a la UE a través de dinero del presupuesto público. En otras palabras, Reino Unido pagaría a Nissan el coste arancelario fruto del Brexit.

La noticia de la adjudicación ha despertado suspicacias en otros fabricantes afincados en el Reino Unido, prácticamente todos en manos extranjeras. Como resulta obvio, quieren el mismo trato para todos, Nissan no tiene por qué ser tratado de otra forma aunque sea el fabricante más prolífico del país en el sector del automóvil. Una fuente citada por Reuters dijo que el Gobierno ha garantizado apoyo a Nissan si no abandonaba el país.

El responsable europeo de Ford, Jim Farley, declaró en la radio BBC que espera que el Gobierno trabaje en una solución que sirva para todo el sector, y no un traje a medida para Nissan. Si bien es cierto que Ford ya no produce vehículos en el Reino Unido, sí tiene dos plantas que fabrican motores, una en Dagenham y otra en Bridgend. Hace pocos años se reorganizó toda la producción en Europa y se repartió el pastel británico entre España, Alemania y Turquía.

JaguarLand Rover también confía en que las reglas del juego sean las mismas para todos, la postura que fue anunciada el mes pasado cuando se sugirió la posibilidad de que Nissan tuviese un trato ventajoso. Desde BMW comentan que no es el momento para plantearse qué hacer, porque el ciclo de vida de sus productos de MINI está al principio.

¿Qué significa esto? Los productores planean con mucha antelación dónde van a producir cada modelo, porque supone una importante operación industrial, cientos o miles de millones de euros en inversión, pactar con los proveedores lo que será necesario, etc. En el caso hipotético de que un fabricante quisiese abandonar Reino Unido a la voz de ya, tendría que plantearse dónde se van a hacer sus productos sino.

Por lo tanto, nadie puede "desconectarse" rápidamente, a menos que la vida comercial de un modelo termine, y las fábricas queden desocupadas. En ese caso, se pueden clausurar o venderlas a quienes estén interesados. Si hay que replantearse el futuro de las fábricas es antes de efectuar las inversiones y prolegómenos

Dado que MINI acaba de lanzar una generación nueva de productos, aunque quisieran abandonar el Reino Unido por pérdida de competitividad, tendrían que esperar varios años. Ahora mismo BMW no puede desplazar esa producción a otro lugar de Europa, por lo que sea cual sea el tipo de Brexit, Oxford seguirá trabajando con MINI. Parte de la producción se ha externalizado a Holanda (VDL Nedcar) y Austria (Magna) con anterioridad.

Fábrica de Nissan en Sunderland

Otro fabricante que se ha pronunciado ha sido Toyota, que exporta a Europa el 75% de su producción. Didier Leroy, responsable de competitividad, declaró a principios de semana que confía en que el Reino Unido trate a todos los fabricantes de la misma forma. De todas formas, Toyota no se plantea abandonar el país aunque haya una subida de los aranceles.

El compromiso de los japoneses con Burnaston sigue firme. Análogamente, la producción de Auris y Avensis no se puede trasladar tan fácilmente de un lugar a otro. Al igual que BMW, están condenados a seguir allí una buena temporada. ¿Y quién se "comerá" ese 10% de diferencia en el precio? Puede hacerse mediante recortes o reducción de costes, lo mismo da.

En lo sucesivo, los responsables de Reino Unido deberán hilar muy fino para que siga siendo interesante producir en su país. La subida de los aranceles puede verse compensada por una libra depreciada (ya lo está, se tendría que mantener), ajustando más los costes de producción (apunta al factor trabajo) o porque los británicos paguen de su bolsillo los aranceles a la UE.

Fuente: Automotive News