Ha fallecido Ferdinand Piëch y con ello hemos perdido un pedazo de historia

El día 25 de Agosto quedará marcado de negro en el calendario de la historia del automóvil, pues Ferdinand Piëch, padre de lo que hoy conocemos como el grupo VAG, perdió la vida debido a un ataque, aunque no se ha hecho pública la causa concreta. Todos los amantes del automóvil deberíamos sentirnos un poco más vacíos, pero el bueno de Ferdinand dejó un legado que nadie olvidará.

El señor Piëch nació en Viena un 17 de Abril de 1.937. Nieto de Ferdinand Porsche, llevaba el mundo del automóvil en las genes. Realizó sus estudios de ingeniería mecánica en la Escuela Politécnica Federal de Zúrich, con la especialidad de "turbinas de gas y vapor".

Ferdinand fue el instaurador de lo que hoy conocemos como grupo VAG

Sus primeras hazañas las desarrollo, como no podría ser de otra manera, en Porsche, bajo las órdenes de su tío Ferry Porsche, donde trabajó en puestos de confianza como jefe del departamento de desarrollo o gerente de I+D, dando luz a coches tan cargados de historia como el 917, múltiple ganador de la histórica carrera de Le Mans, el 908 o incluso, mínimamente, en el 911 ya que cuando entró en la empresa (1963) fue el año de nacimiento del mismo.

Gozó de su puesto en la empresa alemana durante 9 años, hasta que las disputas con su primo Wolfgang Porsche ya eran insoportables, por lo que se llegó al acuerdo de que ningún Piëch trabajaría jamás en Porsche, pero sí ocuparían un puesto en el consejo, como accionistas que eran. La salida de Ferdinand de la marca de deportivos lo llevó a una con no menos historia: Audi.

En Audi estuvo la mayor parte de su vida. Fue su casa. Durante sus años en la marca de los cuatro aros, Piëch dio a luz al primer modelo con un bloque de cinco cilindros, el Audi 100 5E, y ya en 1977 comenzó el desarrollo de un coche que cambiaría las reglas del mundial de Rally, el portentoso Audi Quattro.

El Porsche 917 una de sus grandes atribuciones al mundo del motor

Debido al gran auge que la marca de los cuatro aros posee gracias a la vara de mando de Ferdinand, en 1993 Volkswagen se hace con sus servicios en un ataque desesperado por devolver a la marca a sus buenos años, pues la marca no atravesaba por su mejor momento en aquellos años.

Efectivamente, Piëch la devolvió a sus mejores años, incluso ascendiendo a la marca hasta esferas por encima de lo imaginable. Adquirió Ducati, MAN o Scania. También logró adquirir un 49,9% de Porsche tras un bloqueo, ya que seguía siendo un buen accionista de la marca. Con ello nació lo que hoy conocemos como el grupo VAG.

Bajo el mandato del grupo, Piëch mandó realizar proyectos tan dispares (y tan caros) como el Bugatti Veyron, modelo con el que la empresa jamás vio rentabilidad pero que servía como claro ejemplo de lo que el grupo podía hacer. Ferdinand tuvo un Veyron, con el cual era bastante normal verlo por la calle, incluso a su última mujer Ursula Piëch, miembro del consejo de vigilancia del grupo, también era bastante asidua a coger este hiperdeportivo.

Un de sus grandes obras de ingeniería fue el Bugatti Veyron, un modelo que jamás fue rentable

En el año 2015, el que había elevado al grupo VAG hasta el mas alto olimpo empresarial, dimitió de su puesto después de que el Consejo de Supervisión renovara a Martin Winterkorn. Esto hizo que Ferdinand Piëch saliese del puesto de mando del grupo, también su mujer Ursula dimitió de su puesto. Poco tiempo después salió a la luz el escándalo de la emisiones, el cual le costó a la empresa más de 30 mil millones de euros.

Ferdinand Piëch ha sido el padre de lo que hoy es el grupo automovilístico más grande del mundo. Levantó grandes empresas como Volkswagen y colaboró en grandes vehículos históricos como el 917 o el Veyron. La gran historia que deja tras él, dice todo lo que es preciso saber.

Ferdinand Piëch falleció un 25 de Agosto de 2019