El primer Ferrari eléctrico del mundo a la venta

Ferrari 308 GTE.

El 308 GTE es un one-off del proyecto Electric GT, cuya función principal es convertir viejos clásicos en modelos eléctricos. Considerado el primer y único Ferrari eléctrico del mundo, esta es la pieza más célebre de este proyecto. Este mes será subastada por Barrett-Jackson con el estatus de pieza única en Scottsdale por un precio que no ha sido revelado, aunque no cuenta con reserva, por lo que será una gran oportunidad para muchos coleccionistas o aficionados a los vehículos eléctricos.

Aunque Barrett-Jackson lo ha listado como un modelo 1976, cuando no existía siquiera esta versión, realmente este ejemplar nacía como un Ferrari 308 GTS de 1978 más. Este ejemplar fue el escogido para esta transformación tras haber sufrido un incendio, provocado por una filtración de combustible.

Cuenta con 3 motores eléctricos en sustitución del V8 de 3.0 litros original, que entregaba en la versión de especificaciones USA unos 220 caballos. La potencia total que anuncia a día de hoy el proyecto es de 335 CV (330 hp) y 447 Nm de par máximo, aunque en el momento de su presentación, las cifras eran algo superiores, 420 CV (415 hp) y 447 Nm de par máximo.

Su precio no ha sido revelado.

Los tres motores eléctricos entregan su potencia al eje trasero mediante una transmisión manual Porsche G50, aunque su funcionamiento no es el habitual de una transmisión manual, pues i siquiera es necesario presionar el embrague en las paradas, ya que el motor eléctrico no precisa de ralentí, además, tan solo son operativas unas pocas relaciones de la transmisión. Según algunos medios especializados solo se emplean la segunda y la cuarta.

Sus baterías de litio de 30 kWh le permiten una autonomía en torno de los 120 kilómetros, aunque el proyecto afirmaba que podía contar con conjuntos de baterías de mayor densidad energética, ampliando su rango hasta los 200 kilómetros. Hasta donde sabemos, esta versión nunca ha sido creada o probada y por lo que vemos tampoco se han realizado nuevas unidades de este modelo. Por lo que el ejemplar inicial sigue siendo un one-off. Lo cual resulta curioso, pues esta versión eléctrica no solo es más potente y cuenta con mejor reparto de pesos, además resulta más barato de adquirir que un ejemplar clásico en buen estado con su mecánica original.

Por el momento, parece que el primer Ferrari clásico eléctrico continuará siendo toda una rareza y seguramente pase a formar parte de una colección privada, como la curiosidad que es.

Fotos: Barrett-Jackson