El Ferrari F8 Tributo se cae de producción, los motivos de la decisión de Maranello

El exclusivo Ferrari F8 Tributo ha dejado el mercado. Uno de los modelos más recientes en la historia de la marca de Maranello abandona la línea de producción con solo tres años a cuestas, incluyendo también a a variante de techo descubierto del F8 Spider que llegó un año después, y que tan solo ha sumado dos años a la venta. Una maniobra sorprendente que tiene motivos justificados.

La firma italiana ya solo se dedica a fabricar las unidades encargadas por los clientes antes del cierre de los libros de pedidos en todo el mundo, y desaparecido ya de los configuradores, una decisión que convertirá al modelo en uno de los mas codiciados por su corto recorrido comercial. Pero la decisión no se ha tomado tan a la ligera como se puede suponer, sino que esconde un doble trasfondo. Ferrari mantiene su alto nivel de exclusividad, pero se ha convertido en un fabricante de volumen mediano, por lo que los límites de las emisiones promedio de CO2 en la gama empiezan a hacer mella.

El nuevo Ferrari 296 GTB es uno de los motivos del cese de producción de los F8

Este es uno de los motivos por los que el modelo que ha honrado al potente motor V8 de 3.9 litros biturbo, y que ofrece una potencia máxima de 720 CV, ha dejado el mercado, ya que es el último propulsor que no dispone de electrificación. Una tecnología que ya se ha implantado en recientes modelos, como el más reciente 296 GTB, al que consideran el sustituto del F8 a pesar de que los del «Cavallino Rampante» nunca han confirmado este papel especial.

El F8 Tributo ha sido un verdadero blanco de los clientes más pudientes, junto a los Roma y SF90 Stradale. Curiosamente, solo modelos con motor V8, apuntando la firma un interés más bajo por los modelos equipados con el potente V12. La supresión de ese modelo térmico permite ampliar la producción del nuevo 296 GTB, considerable y obligatoriamente necesario, para cumplir con las primeras entregas para el próximo mes de abril, aunque el interés es tan grande que ya hay pedidos que no se entregarán a los propietarios hasta bien entrado 2023.

El doble objetivo de matar dos pájaros de un tiro se cumple, reducir considerablemente las emisiones de la gama y potenciar las ventas de este modelo, que también estrenará una versión Spider en los próximos meses, ambos con un rendimiento más sobresaliente -830 CV- que los dos modelos que salen de la oferta, y también más eficientes. Y eso sin contar con el estreno estrella de los próximos meses, el nuevo Ferrari Purosangue, del que ya dicen que los libros de pedidos en blanco empiezan a echar humo.

Fuente: Automotive News Europe