Ferrari FXX K, 1.050 CV para la madre de todas las bestias

Señoras y señores, habrán hueco que llega la madre de todas las bestias conocidas y fabricadas por el hombre, el Ferrari FXX K. Por fin ha sido desvelada la criatura perfecta del cavallino. Tomando como base un Ferrari LaFerrari, los ingenieros se las han apañado para que este incremente su potencia, su aspecto y su rendimiento hasta niveles nunca vistos. Menudo bicho.

Aunque ya lo habíamos visto de cerca, Ferrari se guardaba algún secretillo debajo de la manga. El estilo, aunque es reconocible como un LaFerrari, ha cambiado en diferentes partes, creando esa mayor sensación dinámica. Hay que decir que el FXX K solo será apto para los circuitos, por lo que el ahorro de molestas y engorrosas reglamentaciones de circulación ha dado pie a que los diseñadores exploten su parte más visceral en el campo del diseño.

De delante a atrás, lo mires por donde lo mires este Ferrari impresiona y cautiva. Elementos como los pilotos, delanteros y traseros, el capó, los alerones traseros y el difusor posterior cambian significativamente respecto a la versión de calle. Por todos lados encontramos pequeños alerones o deflectores que servirán de ayuda a conducir mejor el flujo aerodinámico. De hecho la mejora es del 50% a baja carga y del 30% en la configuración aerodinámica más agresiva de todas.

Pero si con esto no era suficiente, el motor, ya de por sí excepcional, ha sido mejorado. Seguimos teniendo un conjunto híbrido que combina un motor V12 de 6,3 litros de cilindrada, con otro eléctrico. Además en esta ocasión hay que sumarle un sistema KERS, al estilo de los de la Fórmula 1, que es controlado a través del manettino del volante y que cuenta con cuatro modos posibles: Qualify, Long Run, Manual Boost y Fast Charge. Ya solo los nombres asustan.

Mecánicamente muchos componentes han sido modificados para conseguir una cifra de potencia máxima de 1.050 CV y un rendimiento supremo. Los árboles de levas, los empujadores, que ahora son de accionamiento eléctrico en vez de hidráulico, los neumáticos, la dirección, la suspensión, los frenos, el escape, y el control de tracción se han sometido al tratamiento más radical y agresivo jamás visto en un coche de producción. El sonido, es simplemente sensacional.

Todo ello se puede regular en función de las necesidades y las capacidades del piloto a través de los diferentes controles de la consola y el volante. El interior es puramente de competición, olvídate de aire acondicionado, elevalunas eléctricos, radios o cualquier otra chorrada, este Ferrari está hecho para la competición, así que su objetivo es simple y llanamente la velocidad.

Como ya comentábamos el Ferrari FXX K está destinado únicamente para circuitos. No hay versiones de calle, aunque seguramente pase como con el FXX anterior del que acabó habiendo dos unidades homologadas, una de ellas la pudimos ver recientemente en el circuito de Monteblanco, Huelva. Es el rival natural del McLaren P1 GTR, otra bestia de descomunales proporciones. Seguramente no lleguemos a verlos nunca juntos, pero que impresionante sería ponerlos cara a cara.

Especificaciones técnicas del Ferrari FXX K:

Sistema KERS

• Potencia máxima del sistema - 1.050 CV
  
• Par máximo - 900 Nm
  
• Potencia máxima motor V12/rpm - 860 CV a 9.200 rpm
  
• Par máximo motor V12/rpm - 750 Nm a 6.500 rpm
  
• Potencia de salida del motor eléctrico - 190 CV
  
• Transmisión - 7 velocidades DCT

Motor de combustión interna

• Cilindros - 12 en V con un ángulo de 65º
  
• Cilindrada total - 6.262 centímetro cúbicos
  
• Potencia específica - 137 CV/l

Dimensiones

• Longitud - 4,896 metros
  
• Ancho - 2,051 metros
  
• Altura - 1,116 metros
  
• Batalla - 2,650 metros

Suspensión

• Brazos oscilantes dobles delanteros
  
• Trasera Multi-Link

Neumáticos (Pirelli P-Zero slicks)

• Delante - 285/650 R19x10.5
  
• Detrás - 345/725 R20x13

Frenos (Conjunto carbocerámico Brembo)

• Delante - 398 x 223 x 36 mm
  
• Detrás - 380 x 253 x 34 mm

Controles electrónicos

• Control de estabilidad ESC
  
• ABS de alto rendimiento con programa electrónico EBD de equilibrio
  
• EF1-Trac F1 control electrónico de tracción integrado en el sistema híbrido
  
• E-Diff diferencia electrónico de tercera generación
  
• Amortiguadores magnetorreológicos con solenoides dobles
  
• Aerodinámica activa