Leggenda e Passione: los Ferrari más raros de la subasta de Maranello
En unos días tendrá lugar el evento Leggenda e Passione en Maranello, organizado por la casa RM Sotheby's y la propia Ferrari. Estas son las piezas más raras y peculiares de esta subasta, en algunos casos, auténticas piezas únicas de la marca italiana.
11 min. lectura
Publicado: 03/09/2017 17:00
En solo unos días tendrá lugar en Maranello una de las subastas más curiosas del año. Organizada por la casa RM Sotheby’s en colaboración con la propia Ferrari, Leggenda e Passione está formada mayormente por modelos muy destacables de la marca italiana, además de diversos objetos relacionados con la firma. Entre estos modelos, podemos encontrar piezas muy raras, en algunos casos auténticas piezas únicas, o con una serie de características que les hacen destacar sobre el resto de unidades similares.
En las últimas semanas os hemos mostrado algunos de estos ejemplares, pero ahora trataremos de resumir las más llamativas y raras de todo el catálogo de la subasta, que aunque no necesariamente son las más caras, pues en esta subasta podemos encontrar ejemplares clásicos tremendamente valiosos, son piezas muy raras y destacables.
Ferrari 348 TS 1991 (125.000-150.000 euros)
No es habitual encontrarse con un Ferrari 348, de ningún año ni versión, en una subasta. Su pobre rendimiento dinámico y escasa fiabilidad lograron que incluso la marca hablara mal de él abiertamente. Ni los ejecutivos de Fiat lo querían. Este fue una gran evolución de la amada serie 308/328, sin embargo, a pesar de que sus cifras no eran malas, nunca estuvo a la altura de lo que prometía. Contaba con un V8 longitudinal de 3.4 litros que entregaba oficialmente 300 caballos.
El ejemplar que está a la venta en Leggenda e Passione es probablemente el ejemplar mejor conservado del modelo, esta unidad en versión targa TS cuenta solo con 337 kilómetros de uso a pesar de su avanzada edad, por lo que podemos decir sin temor a equivocarnos que aún se encuentra a estrenar. La casa de subastas no ha revelado su historial, pero podemos apostar a que es uno de los ejemplares del modelo en mejor estado actualmente, y probablemente, también el más caro.
Ferrari 333 SP 1994 (2.8-3.3 millones de euros)
Esta unidad del Ferrari 333 SP no solo es la única que no llegó a competir sino que es el único que ha permanecido a estrenar desde entonces. En su época, mediados y finales de los años noventa, este modelo fue simplemente imbatible en pruebas de resistencia en los Estados Unidos, cosechando numerosos éxitos en diversos campeonatos.
De los 40 ejemplares fabricados, este es el único que ha permanecido desde su fabricación como modelo de exposición, por lo que no ha llegado a recorrer ni un solo kilómetro en circuito.
Ferrari 575 Superamerica 2005 (300.000-350.000 euros)
El Ferrari 575 Superamerica es el sucesor del 550 Barchetta Pininfarina y como este, fue producido en una serie limitada junto al coupé del que deriva, el 575M. Solo fueron ensamblados 559 ejemplares de esta especial versión que contaba con un original techo de cristal practicable, que además podía oscurecerse a voluntad del conductor.
Este 575 Superamerica de 2005 no solo es raro por su baja producción, además, este ejemplar en azul Blu Pozzi cuenta con muy pocos kilómetros, concretamente 9.700 kms. Curiosamente, su precio no parece nada caro teniendo en cuenta su rareza.
Ferrari 550 Sperimentale 2001 (350.000-450.000 euros)
Esta es una de las piezas más extrañas del evento, pues se trata de un prototipo experimental que empleó la marca en las pruebas de desarrollo de los 550 Maranello y 575M. Este cuenta con una configuración nunca vista en los modelos mencionados, por lo que es una pieza única en su género.
A simple vista parece un 550 Maranello con las ópticas del 575M, sin embargo si nos fijamos con atención, este 550 Sperimentale cuenta con mayor distancia entre ejes y una extraña solución de escapes laterales. Donde mejor se aprecian estos cambios es en la vista lateral, pues el capó es 20 cms más largo, cuenta con 3 branquias laterales en lugar de las 2 habituales y unas extrañas taloneras, que sirven para ocultar los escapes, que por su corto recorrido permitía elevar la potencia del V12.
Ferrari LaFerrari Aperta 2017 (3.0-4.0 millones de euros)
El Ferrari LaFerrari Aperta contaba con una producción de solo 209 ejemplares, sin embargo, Ferrari ha decidido fabricar un ejemplar más, el número 210, para esta subasta, cuya recaudación será donada con fines benéficos.
Como ya te contamos en su momento, el ejemplar será desvelado en la subasta y contará con una librea especial y exclusiva para este ejemplar. De este se espera que sea el ejemplar más caro del modelo, tal como pasó con los ejemplares #400 del Enzo y el #500 del LaFerrari coupé, también fabricados fuera de la serie y que sirvieron para causas benéficas.
Ferrari 550 Barchetta 2001 (420.000-480.000 euros)
Al igual que el 575 Superamerica, este ejemplar es uno de los pocos fabricados de la serie limitada descapotable del Gran Turismo V12, aunque este es aún más raro y no solo por el peculiar tono de azul metálico de su carrocería (muy pocos salieron de Maranello que no fueran en rojo o amarillo), sino porque se encuentra prácticamente a estrenar, y tiene un historial ligado a la marca.
Esta unidad es la número 140 de las 448 construidas y cuenta solo con 900 kilómetros de uso, una cifra realmente ridícula para la edad del modelo, que cuenta con casi 20 años, y su primer propietario fue un director de la marca, cuya identidad, por el momento no ha sido revelada. Pero sí se conoce que ha permanecido todo este tiempo en una gran colección de modelos de la marca.
Ferrari 288 GTO 1985 (3.25-4.0 millones de euros)
Los Ferrari 288 GTO son piezas raras, muy deseadas y valoradas, pero el precio que estima RM Sotheby’s por este ejemplar es estratosférico, cerca del doble de los ejemplares más caros subastados nunca del 288 GTO.
Aunque argumentos no le faltan, pues no solo es una pieza muy rara, pues solo se fabricaron 272 ejemplares en total, sino que esta es una de las denominadas versiones lightweight -oficialmente no existió esta versión- que no contaban con el equipamiento básico, como radio o elevalunas. Se cree que solo 19 de estas unidades salieron con esas especificaciones de Maranello. Aunque la característica principal de este ejemplar es su kilometraje, pues solo cuenta con 729 kms de uso, por lo que es un 288 GTO a estrenar.
Ferrari 458 GT3 2011 (550.000-600.000 euros)
El Ferrari 458 fue una perfecta base para una versión de competición. El ejemplar que vemos en las imágenes sirvió para ese propósito, desarrollar primero el 458 GT3 y más tarde la versión con especificaciones de la clase GTD de la IMSA americana.
Nunca llegó a competir, pero esta unidad sirvió como vehículo de tests para Pirelli y también para los tests “Balance of performance” realizados en varios circuitos europeos. Dispone de 22.000 kilómetros de uso y a su motor, según la casa de subastas, le quedan solo 5.000 kms de vida útil.
Ferrari 512 BB (295.000-345.000 euros)
Este no es un 512 Berlinetta Boxer más, pues fue el primer ejemplar de producción del modelo, empleado por la marca para su presentación en el Salón de París de 1976 y el de Ginebra en 1977, además de servir a propósitos publicitarios y comerciales.
A pesar de su larga vida y tras haber pasado por numerosas manos, este se encuentra en perfecto estado y mantiene todos sus elementos originales, incluyendo el motor de 12 cilindros plano que le da nombre.
Ferrari 365 GTB/4 1969 (1.4-1.7 millones de euros)
El modelo que aparece en la fotografía cubierto de polvo ha sido rescatado este mismo verano en Japón, donde ha permanecido en estado de abandono durante cerca de 4 décadas. Hasta su aparición en este catálogo de subastas, esta unidad simplemente no existía para la inmensa mayoría de coleccionistas y especialistas de la marca, pues se desconocía incluso su propia existencia.
Este es el único Ferrari Daytona de calle fabricado en aluminio de toda la producción del modelo, un hecho que muy pocos conocían, pues solo fueron fabricados 5 ejemplares con este material y todos, salvo este, fueron destinados a competición. Comprado originalmente por un amigo personal de Enzo Ferrari, este viajó por medio mundo hasta acabar en Japón, donde su último propietario lo mantuvo oculto, negando cualquier posibilidad de compra incluso a los pocos que conocían su paradero.
Fotos: RM Sotheby' s