Este viejo Ford custom de 1934 no tiene uno sino 3 bloques V8 de 5.7 litros
Tres bloques de 8 cilindros situados longitudinalmente en el mismo vano motor, el resultado son 24 cilindros y más de 17 litros en un Hot Rod único. Denominado Panther, está fabricado sobre un viejo Ford de 1934 del que prácticamente no queda nada visible salvo la trasera.
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Publicado: 04/04/2017 19:00
Longitud no le falta a esta extraña realización.
La tierra de los Hot Rods es indudablemente los Estados Unidos. Allí cualquier cosa es posible sobre un viejo bastidor de largueros y cuanto más grande y espectacular mejor. En este caso nos encontramos con una curiosa preparación de las que se realizan única y exclusivamente para llamar la atención, sin muchas intenciones de poder emplearlo realmente en las calles. Para ello, han instalado no uno, sino 3 bloques V8 de 5.7 litros preparados sobre un viejo bastidor Ford, con las lógicas y evidentes consecuencias estéticas.
El resultado es lo que nos podríamos esperar, un enorme bastidor Ford de 1934 que ha sido creado ex profeso para esta situación, con los 3 bloques V8 situados longitudinalmente, uno tras otro, en el eterno vano delantero. Curiosamente, los bloques no son Ford, sino Chevrolet 350 (5.7 litros cada uno).
No hay demasiados datos sobre su historia, quién fue el taller responsable o si fue un pedido especial de algún cliente, aunque eso es lo de menos, a día de hoy este Ford custom está disponible a la venta en un concesionario de Florida por el módico precio de 124.995 dólares. ¿Las posibilidades de usarlo en el día a día con comodidad?, escasas, por supuesto.
En total son 24 cilindros y más de 17 litros.
Tampoco conocemos la cifra de potencia combinada de esta bestia de 24 cilindros y más de 17 litros, pero teniendo en cuenta que las variantes más potentes de los bloques Chevy 350 entregaban más de 350 caballos y que estos cuentan con importantes mejoras aftermarket, como los carburadores Edelbrock, es lógico pensar que la cifra debe estar rondando entre 1.000 y 1.300 caballos.
Esta bestia recibe el nombre Panther y cuenta con una estética poco habitual en este tipo de realizaciones. El frontal y la zona lateral han sido creados inspirándose en clásicos europeos, como el Mercedes 540K o el Jaguar SS100, mientras que en la trasera encontramos la zaga completa de un Ford roadster de 1934. El escueto habitáculo biplaza, revestido de rojo y dorado, solo cuenta con la protección de un pequeño parabrisas dividido, que subraya la estética Hot Rod del conjunto.
Las sensaciones de conducción que debe aportar un bastidor de este tamaño, con el más que evidente peso y un habitáculo tan retrasado deben ser únicas, pero sobre todo por el sonido que deben producir nada menos que 3 bloques V8 a la vez, cuyo sonido ya de por si es muy característico.
