Mecum Auctions no logra vender el Ford GT que les costó una demanda

Ford GT 2017 bastidor #48.

El pasado mes de mayo, Mecum Auctions subastaba un ejemplar del Ford GT 2017 rodeado de polémica. Ford había intentado por todos los medios que la casa de subastas no subiera el ejemplar al estrado, con visita al juzgado incluida, pero la jueza había fallado a favor de Mecum, por lo que el deportivo de fibra de carbono fue subastado finalmente por 1.8 millones de dólares.

Poco después conocimos el resto de la historia. El vendedor en ese momento no era el primer propietario del Ford GT y por tanto no era quien había firmado la cláusula que compromete a todos los propietarios a no vender el coche en los primeros 24 meses tras la entrega. De ahí que ni este ni Mecum tuvieran ninguna obligación contractual con el fabricante a los ojos del tribunal. Sin embargo, los abogados de la marca no cejaron en su empeño y demandaron más tarde a la casa de subastas y, aunque no lo podemos confirmar, seguramente también a los dos propietarios anteriores.

Aún así, hace solo unas semanas, Mecum volvía a anunciar la venta del mismo ejemplar del deportivo, la unidad número 48 del Ford GT 2017, en su evento de Monterey, el más exclusivos y mediático del calendario de esta casa de subastas estadounidense.

Durante su subasta original en mayo de 2018.

De manera un tanto incomprensible, apenas unas semanas después de ser vendido por 1.815.000 $ el ejemplar volvía a estar disponible. ¿Acaso algo no había sido del agrado de su nuevo propietario?. El ejemplar seguía estando a estrenar, con solo 8 millas en su marcador, por lo que no creemos que su nuevo propietario siquiera lo hubiera probado. ¿Tal vez era un movimiento especulativo?, ya que bien pudiera ser que su nuevo dueño quisiera aprovechar el tirón mediático que había tenido este ejemplar con la polémica, o tal vez hay algo más.

Por el momento no ha trascendido si Ford ha tomado medidas contra su nuevo propietario o si simplemente se han puesto en contacto con él. Pero lo cierto es que parece que el ejemplar le quemaba en las manos, por lo rápido que ha querido deshacerse del deportivo de motor central.

No sabemos si es precisamente debido a la polémica, pero el caso es que la jugada de venderlo con tanta premura no parece haber salido bien, ya que en Monterey no alcanzó el valor que había obtenido el pasado mes de mayo ni el precio de reserva, que entendemos estaba cifrado en 1.7 millones de dólares, pues estas eran las estimaciones mínimas fijadas por la casa de subastas. La puja más alta fue de 1.6 millones, por lo que por el momento el vehículo sigue estando disponible para todos aquellos que deseen pujar por él.

Fotos: Mecum Auctions