Mustang Shelby GT350: análisis de su apartado técnico tras la demanda colectiva
Repasamos el apartado técnico del Mustang Shelby GT350 tras la demanda colectiva que han interpuesto algunos propietarios del modelo contra Ford. Estos alegan que el GT350 fue anunciado como apto para uso en circuito a pesar de carecer de ciertos elementos necesarios para esta función.
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Publicado: 26/03/2017 15:00
La pasada semana nos llegaba la noticia de que algunos clientes, propietarios del actual Shelby GT350, se habían unido en una demanda colectiva contra Ford por el rendimiento de sus vehículos. La demanda alegaba que Ford les había vendido un modelo anunciado como apto para la pista, sin embargo, al emplearlo a fondo en circuito los modelos sufrían de sobrecalentamiento, provocando que se activara el modo seguro del vehículo, restando velocidad y no permitiendo acelerar.
Algunos vehículos disponen de este tipo de sistemas para salvaguardar los órganos mecánicos, dejando el vehículo prácticamente muerto ante un fallo o problema, y así evitar que vaya a mayores.
La demanda hace mención a los Shelby GT350 modelo 2016, no a la versión GT350 R, más preparado para pista. Y el motivo no es otro que la ausencia de refrigeradores en la transmisión Tremec y el diferencial trasero de deslizamiento limitado Torsen 3.73. Analizando toda la información ofrecida por la marca desde el lanzamiento de los Shelby GT350 y GT350R, descubrimos que efectivamente la marca ha anunciado en todo momento tanto el GT350 como el GT350R como modelos aptos para pista, y que en la versión base del GT350 no estaban incluidos estos elementos, sino que formaban parte del Track Pack opcional que podía solicitarse en el concesionario.
Esto fue así para los modelos 2016, puesto que a partir del modelo 2017 Ford comenzó a incluirlos de serie, como hemos podido comprobar en el configurador de la marca.
La pregunta es por qué estos propietarios no incluyeron todos los elementos destinados para pista en sus unidades, sobre todo aquellos que pensaban destinar su deportivo en circuito. Esto es probablemente lo que alegue Ford de prosperar la demanda, que no incumplió ningún contrato al permitir que sus clientes encargaran sus coches con una configuración más apta para carretera que para el circuito.
Otra cosa será la clase de argumentación que emplearan los concesionarios a la hora de vender esas unidades del GT350, aunque por el momento la demanda es contra Ford Motor Company, y no contra algún distribuidor autorizado.
Shelby GT350
Sobre el papel, los Shelby GT350 son las variantes más radicales del Mustang fabricadas por la propia Ford. Su corazón es el motor Ti-VCT V8 de 5.2 litros denominado Voodoo. El bloque V8 Voodoo pertenece a la familia de motores modulares de Ford y es un derivado del V8 de 5.0 litros Coyote que podemos encontrar en el Mustang GT actual.
Las diferencias del V8 Voodoo son varias, además del aumento de cilindrada, dispone de un cigüeñal plano, en los que sus codos o muñequillas forman un ángulo de 180 grados en lugar de cada 90, como es habitual en un V8. El resultado es que el orden de explosión de los cilindros se alterna entre un lado de la V y el otro, reduciendo el solapamiento de los impulsos de presión de escape en cada bancada y permitiendo una mejor respiración de los cilindros.
En el caso del V8 Voodoo, encontramos además una distribución mejorada con respecto al V8 del Mustang GT estándar, lo que permite un rendimiento mayor, sin necesidad de sobrealimentación. El V8 Coyote eroga en el Mustang 2016 441 CV (435 hp) y 542 Nm de par, mientras que el V8 Voodoo de los GT350 y GT350R dispone de 533 CV (526 hp) y 582 Nm de par.
En cuanto al bastidor, los GT350 cuentan con una suspensión y frenos realmente mejorados. En la zona delantera encontramos refuerzos en fibra de carbono, un material que podemos encontrar en otros elementos, como la barra de refuerzo opcional de torreta a torreta delantera. Los amortiguadores son MagneRide de serie. En el apartado de frenada, nos encontramos con unos enormes discos ventilados de 394 m delante y 380 mm detrás, con pinzas de 6 pistones en el eje delantero firmados por Brembo y de 4 pistones en el trasero.
Las llantas son de 19 pulgadas de aluminio de serie, siendo de fibra de carbono las del GT350R, con neumáticos Michelin Pilot Super Sport en ambos casos.
Sobre el papel, el modelo cuenta con unas especificaciones bastante exquisitas y claramente destinadas a un uso intensivo, como el que se le da en pista en una jornada de track day. Evidentemente, la alternativa de sistemas de refrigeración de transmisión y diferencial es estrictamente necesaria para esta función y por eso la marca lo ha incluido de serie en el modelo 2017. Estaremos atento a la evolución de esta demanda.