Ford replantea su gama de acceso
Ford ha vuelto a ser un fabricante rentable en Europa, y seguirá aumentando su margen. Una de las acciones que llevarán a cabo es reposicionar su gama de coches de acceso, para que los clientes pongan más dinero en ellos.
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Publicado: 19/06/2016 19:00
El fabricante americano tiene una gama hecha al gusto del consumidor europeo, aunque no existe una diferenciación tan radical como la que existía hace unos años. Bajo la política One Ford, se hacen coches que funcionen en la mayor parte del mundo con mínimos cambios, del Ka+ al Mustang.
Además, Ford apunta hacia arriba, una marca con mejor relación valor/precio y que coquetea con las Premium. Marcas como Dacia explotan mejor el concepto de los coches pelados con un precio de derribo. Solo hay que ver el Ka, que aun con una oferta que lo deja a tiro por 6.290 euros -con PIVE y financiando- no es un modelo fácil de ver. Y viene con su aire acondicionado y todo.
El Ka, que tiene fecha de caducidad, es primo del Fiat 500 y se produce en el mismo lugar, solo que el italiano vende cinco veces más, y el modelo se ha convertido en submarca. Ford abandona el segmento A, y colocará al Ka+, que podemos considerar como un A+ o un B-. ¿Qué significa esto?
El nuevo Ka+, que se conoce en otros mercados como Figo, es un poco grande para ser del segmento A, y puede competir con coches del segmento B que vayan poco equipados. Es el mismo planteamiento que el del Mitsubishi Space Star. Tendrá un precio a partir de 9.900 euros, y ya viene con un equipamiento muy razonable, aunque el aire acondicionado es opcional.
A su vez, la próxima generación del Fiesta prescindirá de la versión básica, ya que ese hueco lo rellenará el Ka+. Ford quiere que el nuevo Fiesta sea un coche un poco más caro, pero merecerá la pena al tener mejor equipamiento, interiores más sofisticados, etc. Así los dos coches no competirán entre ellos, de hecho, el Fiesta básico tiene un precio inferior a 9.900 euros, pero el Ka+ aún no he llegado.
Con los años, los modelos más pelados han dejado de tener el protagonismo que tenían. Cada vez los clientes exigen coches más completos, pero en un tamaño inferior, y los acabados que más se venden son los medios y altos. Las versiones con el precio de derribo interesan muy poco si nos salimos del ámbito de las empresas de alquiler.
Hay otros dos modelos en la gama de acceso, que son el B-MAX y el Ecosport. Empezando por el último, el crossover urbano tuvo que actualizarse rápidamente porque no estaba a la altura de las expectativas del consumidor europeo. En un segmento donde debería "venderse solo", las ventas no han acompañado. Tras los cambios recientes, en los que destaca la supresión de la rueda de repuesto de portón, y unos interiores de mejor calidad, las ventas han subido.
En cuanto al B-MAX, aunque es una alternativa muy interesante, no está vendiendo todo lo que se esperaba. Es menos espacioso que un Tourneo Courier, pero más amplio que un Fiesta y un Ecosport. El diseño está un poco condicionado a las puertas traseras basculantes, pero tiene las ventajas de un monovolumen en un espacio exterior compacto. Cuando se actualice estéticamente, lo disfrazarán de crossover para hacerlo más atractivo.
Como podemos ver, la oferta de segmento B es considerable en esta marca, y la mayoría de las necesidades están cubiertas. Y dado que los clientes son cada vez más pragmáticos y eligen mejor en función de sus necesidades, es más fácil escoger el Ford adecuado para ellos.
Todos estos modelos se van beneficiando poco a poco de las tecnologías de los hermanos mayores, como SYNC, las llaves inteligentes "MyKey", asistencias a la conducción o elementos de cierto lujo, como asientos calefactados, tapicería de cuero, faros que iluminan mejor, etc. Todo esto era impensable hace solo una década.
Cabe esperar que lleguen versiones Vignale para los modelos más pequeños, de esa forma pueden ser alternativas a modelos Premium por un precio inferior, a cambio de mayor sofisticación interior, porque menos puede ser más, y coche pequeño no es sinónimo de coche barato.
Hace tiempo que marcas como MINI, Fiat o DS han marcado el camino. Si al cliente se le ofrece un producto de mayor calidad en un tamaño compacto, puede decantarse por él, si el precio es razonable. La guerra de los coches baratos ya no es de Ford, la tarta de los Premium es más interesante, y da más dinero.