Ford presenta una tecnologia única, un cable de carga refrigerado para eléctricos
Ford no solo se halla inmersa en el desarrollo de nuevos modelos eléctricos, que presentará a partir de 2022, sino que también aborda investigaciones especiales en el mismo campo. La última novedad es la presentación de la patente de un cable de carga con refrigeración líquida, concebido con especialistas de una universidad americana.
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Publicado: 12/11/2021 18:00
Hasta ahora cada fabricante tenía un tipo de cable de carga para sus coches eléctricos, diferente también según el sistema y potencia de carga. Bosch, el gigante de los componentes de automoción, ha anunciado ya un cable estándar válido para todos los modelos que empezará a vender a mediados de 2022, lo que facilitará enormemente esta tarea a los clientes.
Los especialistas de Ford también trabajan en la tecnología del cable de carga, un sistema realmente inédito en el que nadie había pensado hasta ahora, pero del que dicen es una interesante -y muy importante solución- para aprovechar al máximo la potencia de carga en los coches eléctricos y reducir los tiempos. En estrecha colaboración con ingenieros e investigadores de Ford y de la Universidad Purdue de Indiana, en Estados Unidos, ya cuentan con un prototipo de un cable de carga con refrigeración líquida, del que ya han solicitado su patente.
El futuro cable de carga, que todavía tardará un tiempo en llegar al mercado, cuenta con la ayuda de líquido refrigerante especial que se evapora, al mismo tiempo que disipa el calor generado de la elevada corriente eléctrica que fluye desde el cargador hasta el vehículo. De esta forma y con un cable de carga refrigerado, es posible aumentar la potencia y la velocidad, reduciendo el tiempo total del proceso a minutos, que no han precisado los investigadores.
«Hoy en día, los cargadores tienen limitaciones en cuanto a la rapidez con la que pueden cargar la batería de un vehículo eléctrico debido al peligro de sobrecalentamiento. La carga más rápida requiere más corriente para viajar a través del cable de carga», explica Michael Degner, líder técnico senior de Investigación e Ingeniería Avanzada de Ford, añadiendo que «Cuanto mayor sea la corriente, mayor será la cantidad de calor que se debe eliminar para mantener el cable en funcionamiento».
Al respecto, también se han manifestado fuentes de la Universidad de Purdue han señalado que «El tiempo de carga de un vehículo eléctrico puede variar ampliamente, desde 20 minutos en una estación hasta horas en una cargador doméstico, por lo que puede generar ansiedad a los que consideran comprar un vehículo eléctrico. Nuestro laboratorio ha ideado una solución para situaciones en las que las cantidades de calor que se producen están más allá de las capacidades de las tecnologías actuales». Los responsables señalan que las investigaciones se encuentran en una fase muy avanzada, lo suficiente como para registrar la patente de protección, a la vez que han anunciado la intención de probar un prototipo de este cable de carga en los próximos dos años para determinar velocidades de carga más específicas en ciertos modelos de vehículos eléctricos.