La Fórmula E hace un repaso por lo mejor y lo peor de su año 2019

La Fórmula E apostó desde el inicio por un calendario 'invernal', a estela de deportes como el fútbol y marcando así diferencias con la gran mayoría de categorías. Esta decisión provocó que la serie eléctrica tenga temporadas bianuales, que arrancan en un año y acaban en el siguiente. Pese a todo, gran parte de cada campaña se disputa en el año natural, por lo que 2019 queda ligado casi en exclusiva a la 'Season Five'. Con un único ePrix fuera de este marco y la temporada 2019-20 apenas iniciada con un evento doble, la Fórmula E ha hecho un repaso por lo bueno, lo malo y lo 'feo' de su año 2019.

El año 2019 para la serie eléctrica comenzó en Marrakech, segunda cita de la 'Season Five'. El portugués António Félix Da Costa estrenaba liderato tras ganar en Ad-Diriyah, pero la cita en el circuito semipermanente marroquí terminó realmente mal para BMW. El belga Jerome D'Ambrosio se anotó el triunfo. Sam Bird recogió el testigo para ganar el ePrix de Santiago de Chile, mientras que Lucas Di Grassi se impuso de forma agónica en Ciudad de México. El triunfo del brasileño tras superar a Pascal Wehrlein en la misma línea de meta ha sido una de las imágenes de 2019 para la Fórmula E.

Pese a terminar como campeón, Jean-Eric Vergne no tuvo un papel protagonista en 2019 hasta bien entrado el año. De hecho, la primera victoria del francés llegó en el ePrix de Sanya en el mes de marzo. El piloto de DS Techeetah acabaría ganando también en Mónaco y Berna para asegurar su segunda corona y poner en bandeja el título de constructores a DS Techeetah. Con todo, el camino de Vergne hacia el título logrado con en Nueva York estuvo regado de grandes batallas e imágenes para el recuerdo como el primer podio de Felipe Massa o el caos inicial, con montonera incluida, del ePrix de Berna.

Fotos: FIA Fórmula E