El G-Power GP 63 BI-TURBO marca un nuevo límite con el Mercedes-AMG G 63
En poco más de dos años, el exclusivo Mercedes-AMG G 63 dirá adiós. El todoterreno de la marca de la estrella se convertirá en un modelo eléctrico, por lo que los especialistas en tuning ofrecen nuevas creaciones. Como esta propuesta de la versión más deportiva, que alcanza un nuevo nivel con el G-Power GP 63 BI-TURBO.
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Publicado: 16/12/2021 08:00
En poco más de dos años, el Mercedes Clase G dirá adiós al mercado. La marca de la estrella ya ha confirmado que el todoterreno se convertirá en un modelo eléctrico y que no perderá su esencia, ni estética ni su capacidad todoterreno. Pero, aunque llegue una versión deportiva preparada por los de AMG, sin duda sí perderemos el característico sonido del brutal motor V8 biturbo de 4.0 litros que anima al AMG G 63.
Este es el motivo por el que, en los últimos meses, están saliendo cada vez más preparaciones especiales sobre este modelo, cuya presencia se presta realmente a creaciones realmente únicas. Y los alemanes de G-Power no han querido tampoco renunciar a la oportunidad de presentar su propia visión de un todoterreno con un nivel de prestaciones tan alto como difícil de superar. Así es el GP 63 BI-TURBO.
El G-Power GP 63 BI-TURBO entroniza al Mercedes Clase G
Esteticamente no hay grandes novedades, ninguna que transforme la estética del más potente de la Clase G, más allá de unas imponentes llantas de aleación forjada, típicas de los Hurricane, con hasta 23 pulgadas de diámetro. El especialista alemán en tuning ha señalado una cualidad especial de las llantas, y es que están fabricadas con aluminio utilizado en aeronáutica, un sofisticado material como la cubierta de fibra de carbono del motor.
Sin embargo, los de Baviera han prestado una mayor importancia al vano motor, desarrollando hasta tres paquetes de aumento de las prestaciones, los tres muy por encima de los 585 CV que homologa el modelo en potencia máxima y los 850 Nm de par motor: los «GP-700», «GP-750» y «GP-800». El primero cuenta solamente con un módulo especial que se conecta a la unidad de control del motor y aumenta estos valores hasta 700 CV y 950 Nm, mientras que el segundo requiere nuevos colectores además del software y el módulo de control. El resultado ya es brutal, llegando hasta los 750 CV y 1.000 Nm.
El tercer nivel es prácticamente inalcanzable, al sumar todas las mejoras anteriores y sustituir los dos turbocompresores por unos de mayor presión de sobrealimentación, alcanzando los 800 CV y 1.050 Nm de par motor. Los más adinerados clientes no tendrán reparos en pagar los 22.000 Euros que cuesta hacerse con este kit, sumando también los 1.785 Euros que cuesta cada llanta. A cambio, tendrán un AMG G 63 realmente único.