Glickenhaus y ByKolles inician su batalla contra los grandes colosos del WEC en las 1.000 Millas de Sebring
La temporada 2023 del WEC arranca en las 1.000 Millas de Sebring con la presencia de dos equipos que mantienen la esencia de carreristas clásicos: Glickenhaus y ByKolles en su retorno como Vanwall Racing.
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Publicado: 15/03/2023 07:30
La nueva era de la resistencia arranca en el WEC con las 1.000 Millas de Sebring. La primera ronda del calendario marca el inicio de la convergencia entre prototipos LMH y LMDh. Una nueva etapa que se escribe en torno a grandes fabricantes como Toyota, Peugeot, Ferrari, Porsche o Cadillac, pero también con proyectos de menor peso y gran personalidad como son los de Glickenhaus y ByKolles, ahora bajo el nombre de Vanwall Racing.
Glickenhaus es un fabricante pequeño con un modelo de negocio muy concreto y proyectos en competición muy interesantes. Sin el músculo financiero y técnico de los grandes fabricantes de vehículos, la marca de Jim Glickenhaus compite en el WEC con un prototipo LMH que no cuenta con tecnología híbrida. El SCG 007 LMH ha estado presente en el Mundial desde el cambio normativo de 2021.
Glickenhaus y Vanwall Racing tienen la difícil misión de sobrevivir en una parrilla llena de grandes fabricantes
ByKolles cuenta con un pasado guadianesco en el WEC durante la etapa LMP1. La estructura alemana tuvo distintos encontronazos con el Mundial como parte de un proyecto que apareció y desapareció de la parrilla en distintos momentos. Con todo, Colin Kolles ha puesto todo lo necesario para formar parte de la nueva era de la resistencia bajo la bandera de Vanwall Racing, también con un prototipo LMH sin componente híbrido.
Aunque la esencia de los dos proyectos es ligeramente distinta, lo cierto es que comparten el espíritu carrerista del pasado en contraposición con las grandes marcas. Glickenhaus y Vanwall Racing tienen la difícil misión de sobrevivir en una parrilla llena de prototipos LMH y LMDh con un menor presupuesto y recursos que sus rivales.
Las claves de Glickenhaus
Glickenhaus ha decidido consolidar su proyecto en el WEC y competirá a tiempo completo con una unidad de su SCG 007 LMH. Además, tendrá un segundo chasis en las 24 Horas de Le Mans. A diferencia de la pasada campaña, la formación americana tiene previsto disputar todas las rondas del calendario. Un esfuerzo económico importante para intentar plantar cara a los grandes fabricantes presentes.
En lo que respecta a las 1.000 Millas de Sebring, el Glickenhaus #708 contará con una notable alineación de pilotos, en la que el talento es clave común. A los mandos del LMH no híbrido de la formación estadounidense estarán el neozelandés Ryan Briscoe y los franceses Romain Dumas y Olivier Pla, todos presentes en el proyecto de Scuderia Cameron Glickenhaus en 2022.
Las claves de ByKolles
Por su parte, ByKolles arranca una nueva etapa como Vanwall Racing con el nuevo Vanwall Vandervell 680 LMH. El prototipo LMH no híbrido de la formación alemana ha seguido un programa de desarrollo bastante sólido, si bien no está claro cuál puede ser su nivel real frente a los grandes colosos del WEC. El proyecto, eso sí, cuenta con tres pilotos de pedigrí y origen muy diverso.
El francés Tom Dillmann ha sido parte del proyecto de ByKolles durante varias temporadas y eso le permitió competir con el LMP1 del equipo. Esteban Guerrieri es una de los fichajes para la nueva temporada, aunque el argentino ha sido parte del programa de desarrollo del Vanwall Vandervell 680 LMH. El argentino proviene del mundo de los turismos. Con todo, la gran estrella del equipo es el canadiense Jacques Villeneuve en su retorno a la competición de primer nivel.
Fotos: Glickenhaus / ByKolles