El Gobierno multará a 1.200 gasolineras si no instalan puntos de carga rápida para eléctricos

El Gobierno obligará a 1.200 gasolineras a instalar puntos de carga para coches eléctricos.

Parece ser que el anuncio de la prohibición de la venta y matriculación de coches diésel, gasolina e híbridos en España a partir del 2040 no era el único anuncio que el Gobierno tenía preparado. El anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética va un paso más allá y cuenta con un «plan exprés» para llenar el territorio de puntos de carga rápida para coches eléctricos.

El Gobierno dará un plazo máximo de 27 meses para que todas las estaciones de servicio que vendan más de cinco millones de litros de combustible al año instalen un servicio de carga rápida para vehículos eléctricos. Un total de 1.200 gasolineras se verán afectadas por esta medida, que de no cumplirla, serán multadas con hasta 30 millones de euros por haber realizado una «infracción muy grave» de la Ley de Hidrocarburos.

Según el documento al que ha tenido acceso El Mundo, se establece varias fases de implantación de lospuntos de carga con una potencia mínima de 22 kW, con una duración próxima a los 20 minutos. La primera afectará a las denominadas supergasolineras», aquellas en las que se comercializa más de 10 millones de litros de carburantes al año. Se baraja que el coste de la instalación de estos puntos de carga rápida estará sobre los 15 millones de euros y estarán localizados tanto en las grandes ciudades como en las autopistas de mayor tránsito.

Las gasolineras que no instalen los puntos de carga serán multadas con hasta 30 millones de euros.

En los nueve meses posteriores a la aprobación de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, estas gasolineras deberán tener el plan de instalación de cargadores eléctricos. Tras ese momento, los propietarios de las estaciones de repostaje dispondrán de un plazo de 12 meses para tener todos los servicios operativos con una capacidad de suministro de electricidad con origen 100% renovable. Ello obligará a las gasolineras a contratar con los gigantes energéticos del país.

Los cálculos sobre los que trabaja el Ejecutivo apuntan a unas 200 gasolineras en la primera fase de este plan. Ya en la segunda fase de implantación, el número de estaciones de servicio afectadas por la nueva ley será todavía mayor. Este grupo incluye las gasolineras que venden anualmente entre cinco y diez millones de litros de carburante. Para ellas, el plazo otorgado por el Gobierno será de 15 meses para remitir el plan de carga eléctrica y otros 12 meses para poder ponerlo en marcha. Es decir, un plazo total de27 meses desde la entrada en vigor de la nueva ley.

Este plazo también será de aplicación para las gasolineras que más vendan en las provincias donde ninguna estación facture cinco millones de litros al año. Para estos casos, tendrá que instalar el cargador el titular de las instalaciones que sumen un 10% de la demanda total del territorio. Además, también será de obligado cumplimiento para las redes de gasolineras que tienen concesiones aprobadas por la Administración en las autopistas de peaje.

El Gobierno quiere cubrir las autopistas de peaje con puntos de carga rápida para coches eléctricos.

El objetivo final es que, tras dos años de la entrada en vigor de la nueva ley un total de 1.200 gasolineras dispongan de puntos de carga para coches eléctricos. Esto afectará, aproximadamente, al 10% del total de la red del país. Repsol y Cepsa serán de los principales operadores afectados por la nueva ley. Por último, el Gobierno ha abierto la puerta a la concesión de ayudas públicas para financiar parcial o totalmente la instalación de las redes eléctricas en las grandes gasolineras. Por ahora, no se ha dado más detalles al respecto.

Fuente: El Mundo