El Goodwood Revival solo podía ser mejor con manchas de aceite en la pista

Las carreras son parte del encanto del Goodwood Revival.

Este fin de semana está teniendo lugar el festival Goodwood Revival en el circuito de Goodwood, una de las citas con más sabor de todo el gran calendario de eventos relacionados con el mundo del motor clásico. Esta edición 2016 rinde varios homenajes y tributos, como es el caso del célebre piloto y constructor australiano Jack Brabham, el único en vencer en un Gran Premio de Formula 1 pilotando un vehículo que lleve su nombre, suceso del que se cumplen 50 años precisamente ahora, cuando Sir John Arthur Brabham cruzó la meta en primer lugar en el Gran Premio de Francia de 1966.

En el primero de los vídeos podemos ver como la organización del Goodwood Revival se las han ingeniado para reunir este año hasta 31 vehículos relacionados con Jack Brabham en el circuito inglés, formando un desfile no solo de tremendo valor histórico, sino económico, ya que son muchos ceros los que se dan cita en ese metraje de vídeo.

Diversos eventos programados animan y enriquecen el ambiente, que durante todo el fin de semana se traslada en el tiempo a épocas anteriores a 1966, incluso los propios espectadores, que además pueden participar en los diversos premios de vestuario en el evento.

Una de las citas del programa del fin de semana es la subasta de Bonhams, que tenía este año como estrella un ejemplar impecable y sin restaurar del Porsche 550 RS Spyder, que lograba el récord absoluto para el modelo al alcanzar las 4.6 millones de libras, 5.43 millones de euros, superando los 5.35 millones de euros que se pagaron por el ejemplar de Jerry Seinfeld este mismo año. Junto a este se vendieron no pocos deportivos y vehículos históricos, como en todas las citas programadas por esta casa británica de subastas.

Durante todo el fin de semana se reúnen en Goodwood y sus alrededores centenares de participantes y clubes con sus clásicos deportivos, de muchas épocas y tipologías. Pero solo hay una cosa mejor que poder contemplar estas auténticas joyas del pasado, y es poder verlas correr y competir realmente en circuito, tal y como hacían en su época, que fue para lo que fueron creados.

Pero si verlas en circuito puede ser enriquecedor, no podría ser más espectacular si le sumamos un poco de aceite en la pista, tal y como podemos ver en el siguiente vídeo, donde vemos modelos tan raros y costosos como los Jaguar E-Type Lightweight, AC Cobra, Aston Martin DB4 o Ferrari 250 LM mientras se las tienen que ver con el resbaladizo asfalto del circuito británico.

Si ver derrapar un vehículo de competición o salirse por la hierba puede ser llamativo, cuando sabemos que son piezas de cientos de miles o incluso millones de euros, extremadamente difíciles y caras de reparar, puede resultar incluso dramático. Afortunadamente, la pericia de los pilotos evitó males mayores.