Gordon Murray T.50, el sucesor del McLaren F1 entra en escena con un motor V12

Tras numerosos adelantos oficiales finalmente ha sido presentado en sociedad la nueva bestia (o más bien joya) sobre ruedas creada por Gordon Murray Automotive. Un exclusivo y radical superdeportivo que hará las delicias de los coleccionistas más acaudalados y amantes del mundo del motor. Se trata del nuevo T.50, un modelo que llega al mercado con un claro objetivo, ser el «sucesor espiritual» del mítico e icónico McLaren F1.

Se trata de toda una declaración de intenciones pero debemos tener en cuenta que tras el nuevo T.50 se encuentra Gordon Murray, diseñador del mencionado modelo de McLaren que marcó una época. El listón está muy alto, ¿será capaz de alcanzarlo y/o superarlo? El tiempo lo dirá. Aunque teniendo en cuenta toda la información ofrecida por la compañía británica es muy alentadora. Es más, la compañía asegura que el T.50 ha sido creado para «mejorar al McLaren F1 en todos los aspectos».

El diseño exterior transmite fuerza y capacidad, a la par que fluidez y elegancia. Tiene unas formas muy características. ¿Hay detalles que recuerdan al modelo de McLaren? Basta con echar un vistazo al frontal y, en concreto, a la forma que adoptan los grupos ópticos. El techo presenta unas grandes superficies acristaladas, lo que aumenta la cantidad de luz natural que entra en el habitáculo.

En la parte posterior, la cubierta del motor, también acristalada parcialmente, deja entrever el enorme bloque que se esconde en las entrañas del vehículo. Las ópticas posteriores tienen una forma circular muy llamativa y las salidas de escape están muy bien integradas. También hay que señalar el hecho no menor de que la carrocería está construida con fibra de carbono y que se calza unas llantas de aleación forjada de 19 pulgadas en el eje delantero y 20 pulgadas en el trasero. Están envueltas por unos neumáticos Michelin Pilot Sport 4S. Además, dejan a la vista los frenos de alto rendimiento.

Uno de los rasgos más característicos del nuevo T.50 se encuentra en la zaga. Una especie de ventilador con múltiples aspas que ayuda a aumentar la carga aerodinámica en un 50% y que, por si no fuera suficiente, también aumentar la potencia. A ello debemos de sumar unos alerones traseros dinámicos y unos paneles activos debajo de la carrocería.

¿Y qué hay del interior? Si nos aventuramos en el habitáculo del T.50 nos encontraremos con una interesante atmósfera. Todo gira alrededor de la figura del conductor. Y prueba de ello es que tiene un asiento central para el conductor flanqueado por un asiento a cada lado para poder transportar a dos pasajeros. Materiales como la fibra de carbono están muy presentes. Y aunque no debemos obviar cuál es la naturaleza de este vehículo, se han añadido diversos elementos de equipamiento propios de un turismo convencional como un equipo de audio y un sistema multimedia compatible con Apple CarPlay y Android Auto.

Carece de espejos retrovisores convencionales. En su lugar se ha instalado un sistema de cámaras que, según la compañía, hace más fácil la maniobrabilidad.

El Gordon Murray Automotive T.50 emplea un motor V12

El «corazón» de este nuevo superdeportivo es un motor V12 de 3.9 litros de origen Cosworth que desarrolla una potencia de 663 CV y 467 Nm de par máximo. Está asociado a una caja de cambios Xtrac manual de seis velocidades. Por el momento se desconoce cuáles son sus prestaciones pero si tenemos en cuenta que el vehículo pesa solo 986 kilogramos a buen seguro que podrá realizar el sprint de 0 a 100 km/h en muy pocos segundos. A la hora de diseñar y construir esta bestia se ha tenido muy en cuenta el peso. Por ello se ha usado de manera intensiva la fibra de carbono y el aluminio.

La producción del T.50 estará limitada a 100 unidades. Costará, antes de impuestos, 2.36 millones de libras, unos 2.62 millones de euros al cambio. Se creará una red de servicio oficial alrededor del mundo para dar soporte desde Abu Dabi hasta Japón pasando por Estados Unidos y el Reino Unido.

Fuente: Gordon Murray Automotive